Servicio o sacrificio.

4ª parte:

Comentario de Lorena A.

Querido Prof. Olguín: Repasando la lectura del 1º link del presente artículo, quedé sorprendida de lo acertado del tema y la relación que guarda mi comentario anterior con lo que allí se menciona.

Es verdad que uno deja de hacer algo por hacer otra cosa, como todo en la vida. Es el costo de la oportunidad, pero no implica sacrificio, creo yo. Uno eligió hacer un servicio específico en vez de hacer otra cosa, como descansar, pero no por sacrificio, sino por querer ayudar. Uno se siente bien haciéndolo... en mi caso particular, cuando ayudo a alguien me siento retribuida en Amor, es eso... no  es sacrificio, es Voluntad. Al leer el primer link, recordé un pasaje de un libro que hace algunas semanas volví a leer y que marqué, por encontrarlo muy revelador, y habla justamente de esto. El libro se llama: "Por que a mí, por qué esto, por qué ahora", de la autora Robin Norwood y ella, que puede ver el aura de las personas, narra esta parte comprendida en las  páginas 55-57 de dicha obra. Ese ilustrativo relato deseo compartirlo con usted:

 "...Karen, que tenía algo más de 30 años, estaba por entonces en remisión de un cáncer de garganta. Había pasado años luchando por destacarse como actriz. Durante un período muy inactivo de su carrera, contrajo matrimonio y, más tarde, satisfizo al esposo en su deseo de tener hijos. Desde entonces se esforzaba por cumplir con sus trabajos actorales sin desatender a la familia; muchas veces sufría por no poder optar entre su devoción hacia el esposo y los hijos y su gran amor al teatro. En esa oportunidad, en un arrebato de virtud optimista, nos dijo que iba a dejar de actuar para dedicarse al hogar, al esposo y a los hijos, a la felicidad de su familia. Horrorizada, ví la respuesta de su campo energético a lo que estaba diciendo. Mientras hablaba, la envolvió un manto verde gris sombrío, denso y pesado. Comprendí con espanto que estaba pronunciando, posiblemente, su sentencia de muerte. Por muy digna de elogio que sonara su decisión de ser una buena madre y esposa, no era la orientación sincera que debía tomar y su cuerpo emotivo lo sabía. Como la energía sigue al pensamiento, ese manto de materia astral se creaba en correspondencia con la restricción que ese plan representaba para ella. Quizá creía no tener alternativa, atrapada como estaba entre la necesidad de llevar una vida respetable y los deseos más profundos de su corazón: actuar en el escenario. Su decisión de anteponer a su familia no era incorrecta, quizá, dado su sistema de valores, simplemente, no era la más sincera; su campo de energía me mostró lo que en verdad sentía..."

"...No pretendo saber cuál era la solución para Karen, pero sí sé que la decisión tomada serviría para deprimir su campo energético general, y por lo tanto, su sistema inmunológico, algo que ningún enfermo de cáncer puede permitirse."

La autora postula que hay que ser leales a nosotros mismos, si vamos a tomar decisiones que involucren nuestra vida y a otras personas, si dichas elecciones nos empeoran "anímicamente" en vez de ayudarnos, no es lo correcto para la salud de uno, ya sea la salud física, mental o emocional.

Yo pienso, humildemente, que si alguna decisión específica empeora a la persona, eso dificultará futuros Servicios que ella desee hacer, por no sentirse equilibrada. Decidir servir debe nacer del alma, el Servicio nos llena de amor, y no de sacrificio. No hay que forzar; creo que todo llega en su momento. Debemos ser coherentes y consistentes con nuestras emociones y deseos a medida que nos desarrollamos; no ir contra nosotros mismos, porque eso sí sería sacrificio. El desarrollo personal, creo humildemente, es muy importante; el valorarse, el saber que uno merece ser feliz también, eso se logra con el autoconocimiento y acercamiento a Dios, y en la medida que nos vayamos desarrollando, inconscientemente vamos a ofrecer Servicio a los demás y nos llenará de Amor cada vez más.

Quise compartir con usted este caso real que menciona la autora en su libro, porque fue una de las partes del libro que más revelación encontré para mí, además sentí necesidad de hacerlo después de leer el 1º link de Servicio o Sacrificio.

Encuentro muy preciso lo que dice usted: "Pero si al prestar ayuda a nuestros semejantes, eso nos genera daño en vez de gozo, el equilibrio se rompe, pues el Servicio es felicidad, no sufrimiento."

 Un abrazo: Lorena A.

 

 

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