Tantra

 

   Energía Vital Kundalini

   Circulación en el cuerpo humano
 

Recopilado por el Prof. Jorge Olguín.

Desde hace siglos las religiones Asiáticas han hablado de una fuerza mística llamado Kundalini.
La Kundalini es una energía poderosa que las religiones orientales dicen que está enrollada en la base de la espina dorsal en el ser humano.
La circulación de la energía vital en el universo físico se rige y es controlada por la Kundalini.
Esta energía está directamente relacionada con el almacenamiento personal de la energía sexual.
Kundalini toma a la energía sexual en forma cruda y la transforma en energía espiritual de una frecuencia sumamente alta, que permite la activación de actividades paranormales al punto tal que la persona puede desarrollar una elevada intuición y hasta lograr la comunicación con entidades que habitan los mundos suprafísicos de nuestro multidimensional universo.
Es sabido que a través de una relación sexual el varón puede absorber o brindar energía a la mujer. Todo depende como enfoque el acto sexual. Si lo que busca es mero placer, va a causar en la mujer un elevado bajón energético. Si su meta es fundirse con el espíritu de la otra persona, la va a elevar en su energía en forma considerable.

 

  1) Armonización de los Centros Energéticos del Ser Humano
  2) De hologramas, energía y administración de Energía Vital
  3) Efectos benéficos de la complementación de la medicina tradicional con las terapias
      alternativas.
  4) Primeros pasos en el enfoque energético
  5) Dominios de frecuencia y planos sutiles de la materia
  6) Técnicas de energía sutil
  7) Sistemas de energía sutil
  8) El fenómeno de la terapia por imposición de manos
  9) Nuestra relación con los Centros Energéticos
10) Como se distribuye la energía en el organismo
11) La dinámica de los centros energéticos y las lecciones espirituales de la evolución personal
12) Cada centro energético tiene diversas funciones energéticas asociadas
13) Curación Holística y desplazamiento de paradigmas
14) Evolución personal
 
 
 

 Los centros energéticos o chakras y sus características
 
7º) Sahastrara o centro energético Coronario
6º) Agnya o centro energético Frontal  (Tercer ojo)
5º) Vishuddhi o centro energético Garganta  (Laríngeo)
4º) Anahata o centro energético Corazón
3º) Manipura/Nabhi o centro energético Plexo Solar
2º) Swadisthana o centro energético Ara  (Bazo)
1º) Muladhara o centro energético Raíz
 

      Opinión de Gopi Krishna

 
      Conclusión
 
 
        Chakras y Energía vital
 
  

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Energía Vital Kundalini

Circulación en el cuerpo humano
 
 
 

 1) Armonización de los Centros Energéticos del Ser Humano

  Hay una zona total de energía que es extensa, amplia, y comprende todo lo que existe.
  Esta zona de energía es bastamente más complicada y sutil que el mundo físico, donde estamos limitados a ver con nuestros ojos, gustar con nuestras bocas, oler con nuestras narices, oír con nuestras oídos y sentir el tacto con nuestra piel.
  La zona de energía física o de tres dimensiones permite apreciar todas las cosas que nosotros vemos o percibimos con nuestros sentidos, que son muy limitados. Los órganos tienen una gama específica dentro de la que pueden operar, por ejemplo los ojos operan en las frecuencias livianas entre el rojo y el violeta, los oídos entre 20 y 20,000 Hertzios. Más adelante hay una amplia gama de vibraciones que nuestros sentidos físicos no pueden percibir.
  La ciencia y la ingeniería han hecho grandes avances para extender la gama de nuestros sentidos, pero no importa cuan ampliamente se extiendan, hay zonas de energía a las que no pueden acceder.
  Los desarrollos recientes pueden conducir a instrumentos capaces de medir los estados condensados de energía y pueden medir algunas de estas zonas de energía.
  Para cada objeto hay una cantidad de energía; entre la vibración en tres dimensiones de los objetos físicos y la vibración del más alto nivel de la energía cósmica universal.
 
  El nivel más cercano al cuerpo físico se llama el  cuerpo áurico o etéreo.
  El cuerpo áurico existe desde que el cuerpo físico ocupa un ligar en este universo de tres dimensiones y comienza a crecer. Este cuerpo etéreo aloja nuestra persona en el plano material en forma perfecta, para que interactúe en el plano espiritual. Si a uno, por ejemplo, se le rompe un hueso, la lesión puede sentirse en el cuerpo etéreo en el lugar que corresponde a ese hueso físico, porque el campo áurico guarda la información de la lesión. Se ha observado que frecuentemente se sienten dolores asociados con lesiones viejas de huesos que no fueron resueltos por el campo áurico.
  También producen lesiones los traumas de cualquier tipo sufridos en nuestra niñez o adolescencia, que quedan registrados en nuestra memoria sutil afectando nuestra vida de relación sin que –a veces- tengamos conciencia de la forma de que estas experiencias actúan desde nuestro inconsciente (Ver Engramas y Mente Reactiva, en la parte central del website).

   Para que estas situaciones no nos perjudiquen debemos trabajar con técnicas como Psicointegración, que no permite que el ego cree roles de control en la persona. También, debemos reforzar con Psicoauditación que, al eliminar los engramas conceptuales, el cuerpo también sana y "olvida" las lesiones psíquicas que nos pueden estar afectando.
  Recordemos que es la memoria de la lesión la que ocasiona esta recurrencia del viejo trauma o dolor. Al liberarlo de la memoria esotérica las secuelas de trastornos físicos y/o espirituales no afectarán más.
  Esto nos muestra la estrecha comunicación entre las zonas de energía física de tres dimensiones y el cuerpo áurico, vibrando en forma continua y uniforme en ambos niveles.
  Para producir una mejora por medio de la energía es necesario armonizar los puntos de energía del ser humano, llamados centros de energía o chakras
  Esencialmente significa una armonización entre el estado actual de los puntos de energía con la energía cósmica universal como forma ideal
  Por ejemplo la forma ideal de un hueso está en ser fuerte y entero, no roto y débil. La aplicación y armonización de los puntos de Energía entonces tendería a borrar el suceso de la rotura o debilidad del hueso y reemplazarlo en la memoria energética por un hueso fuerte y entero.
  Depende de la profundidad en el que este cambio de energía se produce para determinar la velocidad con que la memoria energética se cambia.
  Si la fe de uno es capaz de aceptar un cambio poco profundo, la armonización requerirá mucho más tiempo, si uno es capaz de aceptar por su gran fe un cambio radicalmente profundo, el cambio puede ser instantáneo.
  La aplicación y armonización de los puntos de energía es uno de los métodos para producir un cambio en el estado físico y anímico del Ser Humano.
  Le pondremos el nombre de Energía Vital al estímulo y armonización de los centros energéticos para producir una mejora en el estado físico y espiritual.
  Los métodos diferentes de aplicar esta energía toman formas diferentes, algunos métodos requieren mayor participación e interacción desde el terapeuta, mientras que otros (como la aplicación de energía) requieren la participación del paciente para dirigir por sí mismo este trabajo.
  En la esencia se utiliza la aplicación de energía como si –simplemente- se encendiera el fuego en un soplete  y se deja que alguna potencia o la sapiencia más alta  dirija la circulación de la energía vital a donde se necesita.
  
 2)  De hologramas, energía y administración de Energía Vital

   El Dr. Richard Gerber dijo que la mayoría de los planteamientos ortodoxos de la curación, como el farmacológico y el quirúrgico,  se fundan  en el  modelo newtoniano  del  cuerpo humano  como una máquina compleja.
  El enfoque einsteiniano  de la terapia vibracional  (“Una filosofía  de la armonización  y estimulación  que quiere dirigirse a la persona como un todo,  es decir,  como complejo de cuerpo/mente/espíritu, y tratarlo mediante  la administración calibrada de cuantos de energía,  de frecuencias  específicamente ajustadas al sistema multidimensional humano.  El terapeuta vibracional  intenta armonizar y estimular el cuerpo físico mediante la integración y el reequilibrio de los sistemas energéticos superiores, que son los que controlan  las pautas  de la manifestación  celular/física”)  considera  al ser humano  como un organismo multidimensional  (“Dícese del espectro total de las energías humanas en sus planos físico, etéreo,  astral,  mental,  causal  y  espiritual superiores”)  constituido  de sistemas  físico/celulares  en interacción dinámica con unos campos de energía complejos que funcionan como reguladores.
La administración de Energía Vital intenta aliviar las enfermedades estimulando y armonizando estos campos de energías sutiles, por el procedimiento de aportar energía al cuerpo.
  El principio holográfico (“Una imagen tridimensional creada por los patrones de interferencia de dos haces láser combinados”)  postula  que cada parte  contiene la información del todo; este principio se refleja  en  el  hecho  de  que  cada  célula  del  cuerpo  humano  contiene  en  su  ADN  (“Ácido desoxirribonucleico, la macromolécula en forma de doble hélice que contiene la información genética codificada que participa a nivel molecular en la reproducción y el desarrollo de las células”) la biblioteca maestra con las informaciones sobre como crear un ser humano entero.
  El cuerpo etéreo es un campo de energía o una plantilla holográfica que transmite información necesaria para el crecimiento, desarrollo y reparación del cuerpo físico. De tal manera que mientras los genes del ADN rigen los mecanismos moleculares que determinan individualmente el desarrollo de las células, el cuerpo etéreo establece la organización espacial del proceso genético.
  Al nivel cuántico de las partículas subatómicas, toda materia está constituida, literalmente por campos de energía congelados, particularizados (por ejemplo, la luz congelada). Los agregados materiales complejos (por ejemplo, las moléculas) son en realidad campos de energía especializados.
  Así como la luz tiene una frecuencia o banda de frecuencias particular, también la materia tiene unas características de frecuencia. Cuanto más alta la frecuencia material, menos densa o más sutil (“Término genérico que se refiere a los cuerpos energéticos superiores al físico, como el etéreo, el mental y el causal, o bien a las energías que se hallan fuera del espacio/tiempo ordinario o positivo, por ejemplo la energía magneto-eléctrica, que se propaga a velocidad hiperlumínica”) es esa materia; así el cuerpo etéreo está formado por materia de una frecuencia más alta que la materia física y por ello recibe el nombre de materia sutil.
  Se postula la posibilidad de que el universo entero sea un gigantesco patrón energético de interferencia dotado de características de tipo holográfico. Así pues, la decodificación de una pequeña parte del holograma universal revelaría la información acerca del todo; almacenado en esa figura matricial. El enfoque selectivo de la conciencia mediante la potenciación de las facultades parapsicológicas ofrece una posibilidad para esa decodificación del holograma universal.
  El movimiento de la fuerza vital en los sistemas fisiológico/celulares se rige por los patrones sutiles del cuerpo etéreo así como por otros inputs de frecuencia todavía más alta que recibe el sistema energético humano. Varias modalidades de tratamiento vibracional, como la homeopatía (“El método que consiste en administrar microdosis de sustancias naturales para combatir las dolencias. El principio homeopático asigna los tratamientos a los pacientes comparando el complejo de los síntomas de la enfermedad con la “imagen”  del remedio, conforme a la ley llamada de la similitud”), las esencias florales y la administración de energía vital pueden influir sobre estos patrones sutiles en el sentido de mejorar el funcionamiento humano y aliviar el sufrimiento de las enfermedades.
 
 
  3) Efectos benéficos de la complementación de la medicina tradicional con las terapias alternativas

    El planteamiento farmacocinético (“Modelo médico que recurre al cálculo de las dosificaciones de medicamentos en base al peso del paciente, sus constantes metabólicas y la velocidad de eliminación,
al objeto de precisar el efecto terapéutico deseado”) utiliza dosis medidas de fármacos para tratar de influir sobre los sistemas físico/celulares del organismo. El modelo farmacocinético se funda en una interpretación  mecanicista, newtoniana,  de las interacciones a nivel molecular,  cuyo ejemplo típico
sería los enlaces fármaco-receptor en función de las dosis, localizados en la membrana celular.
  El planteamiento homeopático utiliza cantidades minúsculas de sustancias medicinales para inducir cambios fisiológicos terapéuticos mediante interacciones en los campos de energías sutiles.
  En los remedios homeopáticos, la signatura energética de la sustancia medicinal se transfiere a un disolvente, como puede ser el agua, y de ésta a una píldora de excipiente inerte, cómo la lactosa. Los efectos benéficos  no son producidos  por las propiedades moleculares  de la sustancia,  sino  por su signatura vibracional.
  En la homeopatía, a más alta dilución, o lo que es lo mismo, a más baja concentración molecular de un remedio, mayor su potencia. Ello difiere con el concepto farmacocinético, según el cual la potencia aumenta con la concentración molecular.
  La homeopatía se funda en la ley de la similitud, según la cual los remedios se eligen por su capacidad para reproducir en un individuo normal y sano los síntomas de la persona enferma. Al establecer la igualdad del complejo de síntomas del paciente con el “modelo homeopático” descrito para el remedio,
se obtiene la sintonía vibracional correcta entre paciente y remedio.
  En homeopatía se elige el remedio con arreglo a su capacidad para estimular y reequilibrar el cuerpo físico suministrándole una frecuencia específica de energía sutil. Si la frecuencia del remedio corresponde a la del estado patológico del paciente, se producirá una transferencia de energía resonante que podrá ser asimilada por el sistema bioenergético (“Cualquiera de las fuerzas eléctricas, electromagnéticas o energéticas sutiles que generan los organismos vivientes”) del paciente, permitiéndole expulsar las toxicidades y recuperar un nuevo punto de equilibrio de la salud.
 
 
  4) Primeros pasos en el enfoque energético

    La medicina ortodoxa ha iniciado ya, gradualmente, la exploración de los usos de la energía para el tratamiento de las enfermedades. De ahí el empleo de radiaciones para tratar el cáncer, el de la electricidad para paliar el dolor y reducir tumores, el de los campos electromagnéticos para estimular la curación de fracturas óseas, y el de los campos magnéticos para aliviar el dolor y la inflamación de la artritis.
  El cuerpo físico posee ciertos circuitos de feedback auto regenerativo, como la “corriente de la lesión”, que fomentan la reproducción celular y la reorganización de los tejidos cuando el organismo ha sufrido una herida. Es posible que existan en el interior de la célula y entre unas células y otras determinados sistemas electrónicos y de efecto semiconductor, que participen en los aspectos normales del crecimiento y de la reproducción celular.
  La ciencia está desarrollando rápidamente nuevas técnicas de síntesis de imagen, como el escáner de tomografía computarizada, el de emisión de positrones y el de resonancia magnética nuclear, que son otras tantas ventanas abiertas sobre la estructura y el funcionamiento del cerebro y del organismo, a disposición de la medicina.
  Ciertos sistemas de fotografía Kirlian (“Un proceso electrográfico desarrollado en Rusia por el ingeniero Semyon Kirlian, que utiliza el efecto corona para captar sobre una película sensible los procesos bioenergéticos de los seres vivos”) han permitido demostrar de manera reproducible el fenómeno llamado efecto de la hoja fantasma (“El que se observa en las fotografías Kirlian de hojas de plantas a las que se ha amputado un trozo, y que aparecen enteras en la electrografía; en esta imagen fantasma vemos el cuerpo etéreo del fragmento de hoja que falta”), cuya interpretación más plausible es que se trata de la imagen del cuerpo etéreo de un organismo viviente.
  Tanto la fotografía Kirlian como los escáneres IMR permiten observar importantes fenómenos celulares y bioenergéticos porque producen frecuencias que entran en resonancia con las componentes naturales, celular o energética, de los organismos que se estudian.
  Algún día será posible construir un aparato de síntesis de imagen que permita obtener la figura del cuerpo etéreo por un procedimiento similar al empleado en la tomografía computarizada. Entonces se sumariará un gran número de secciones transversales hasta que hayamos trazado el volumen del cuerpo etéreo. La base de tal sistema sería un generador de frecuencia que estimulase el cuerpo etéreo por resonancia subarmónica para producir efectos resonantes electromagnéticos (“En el contexto de este  trabajo, el espectro amplio de las energías que se propagan a la velocidad de la luz”).
  Tal aparato de exploración del cuerpo etéreo revelaría las alteraciones significativas de éste antes de que se manifestasen como anomalías celulares patógenas en el cuerpo físico.
 
 
 5) Dominios de frecuencia y planos sutiles de la materia

 Toda materia, tanto la física como la sutil, tiene una frecuencia. Las materias de frecuencias diferentes pueden coexistir en el mismo espacio, al igual que las energías de frecuencias diferentes (por ejemplo, las ondas de radio y las de televisión en el espectro radioeléctrico) coexisten en el mismo espacio sin destruirse mutuamente.
  Los cuerpos etéreo y físico son de frecuencias diferentes y se solapan y coexisten en el mismo espacio.
  El sistema de los meridianos (“Un canal microtubular que conduce una energía sutil nutritiva (ch' i) a los diversos órganos, nervios y vasos sanguíneos corporales, en tanto que Ch’i es una antigua palabra china que designa la energía sutil nutritiva que circula a través de los meridianos”) de acupuntura es una red discreta y organizada de conductos microscópicos por donde el cuerpo físico queda conectado con el etéreo, constituyendo lo que hemos llamado la interfaz físico/etéreo (“El que actúa entre los cuerpos físico y etéreo, constituido principalmente por el sistema de los meridianos de acupuntura; sirve para el intercambio de informaciones y de fuerzas vitales entre las estructuras físicas y las no físicas”).
  El sistema de los meridianos de acupuntura transmite una energía nutricia sutil del medio, llamada tradicionalmente Ch’i, hacia los nervios, los vasos sanguíneos y los órganos internos del cuerpo a través de unas puertas energéticas de la epidermis que son los puntos de acupuntura.
  Las anomalías energéticas del cuerpo etéreo y del sistema de meridianos de acupuntura son precursoras de las manifestaciones físico-celulares de la enfermedad.
  Los energéticos son centros especializados de los cuerpos sutiles, y cada uno de ellos va asociado a un centro principal nervioso y glandular del organismo físico. Los centros energéticos funcionan como transformadores que demultiplican las energías sutiles y las traducen en forma de actividad hormonal, nerviosa y celular del cuerpo físico.
  Los centros energéticos principales, en especial el de la coronilla, el frontal y el de la garganta, son además órganos sutiles de percepción y van asociados, respectivamente, con las facultades parapsíquicas de intuición superior, clarividencia (“La facultad psíquica de ver las pautas de energía sutil superior; es un aspecto mediado por el Centro Energético frontal o Ajna chakra”) y clariaudiencia (“La facultad psíquica de oír lo que corresponde a los planos vibracionales superiores; es un proceso mediado por las energías que circulan a nivel del Centro Energético de la garganta”)..
  Los centros energéticos están conectados entre sí y con los diversos aspectos del cuerpo físico por medio de líneas de transmisión energética llamadas Nadis (“Hilos, caminos sutiles del flujo energético entre los chakras y las diferentes regiones corporales; a diferencia de los meridianos, que tienen un aspecto físico, los nadis no son de carácter físico”) formando en conjunto una red llamada sistema chakra-nadis.
  La energía o sustancia etérea vibra a velocidad hiperlumínica y es de carácter magnético.
. También, el cuerpo etéreo guarda relación energética tanto con la vivencia como con la expresión y la represión de las emociones.
  Las disfunciones del cuerpo etéreo, debidas a desequilibrios emocionales, pueden perjudicar el flujo de energía a través de los Centros Energéticos, lo que resulta  posteriormente en desequilibrios endocrinos y dolencias físicas.
  La conciencia es capaz de ascender hacia dicho cuerpo etéreo y separarse del vehículo físico. Cuando esto ocurre de manera natural, hablamos de proyección astral o experiencia extracorpórea; cuando esta separación de la conciencia se produce de manera traumática, por ejemplo debido a un accidente, se dice que se ha producido una experiencia cuasi-terminal.
  La ecuación de Einstein predice la existencia de una energía más rápida que la luz, la denominada por el doctor Tiller energía magnetoeléctrica (ME) (“La energía que vibra a velocidad hiperlumínica, posee cualidades magnéticas y tiene entropía negativa, según las predicciones del modelo Tiller-Einstein; es la energía o sustancia que corresponde al espacio-tiempo negativo (-S/T)”). Esta energía ME es análoga a la energía o sustancia etérea. La energía ME exhibe propiedades insólitas como una entropía (“En mecánica estadística, parámetro que describe el grado de “desorden”  de un sistema, o número de micro estados entre los que el sistema puede fluctuar. En un sistema muy desordenado, la entropía es grande; a menor entropía, más organizado y ordenado el sistema”) negativa, y es de naturaleza primordialmente magnética, por lo que difícilmente puede medirse con los detectores convencionales de campos electromagnéticos (EM).
  Los experimentos realizados con terapeutas energéticos demuestran que poseen campos de energía cuyas características se ajustan a la predicción teórica formulada para los campos ME, es decir que son de naturaleza magnética y entropía negativa. (“La característica del espacio/tiempo negativo y de la energía magnetoeléctrica, por cuyo influjo los sistemas vivientes y algunos no vivientes tienden a estados de mayor orden y menos fluctuación aleatoria; es por tanto una característica de la fuerza vital”).
  Existen además otros vehículos de frecuencia todavía más alta, el cuerpo mental (“La banda energética de energía sutil que se localiza entre el nivel astral o etéreo y el espiritual”) y el cuerpo causal, (“La banda de frecuencia energética  inmediatamente superior a la del nivel mental”) que también aportan energías al cuerpo físico.
  En la reencarnación tenemos un modelo de proyección sucesiva de la conciencia en varios vehículos físicos a fin de ganar experiencias, conocimientos y madurez espiritual.
  Las experiencias y los conocimientos adquiridos durante todos esos tránsitos vitales se acumulan a nivel del cuerpo causal, (“El cuerpo sutil que está constituido de sustancia causal. Es el nivel al que la conciencia humana guarda todas las experiencias acumuladas durante sus numerosas encarnaciones en el plano físico”). Finalmente se halla la parte espiritual no encarnada a la que llamamos a  veces el Yo Superior o Thetán.
  La reencarnación es uno de los pocos modelos que explican por qué las enfermedades, al igual que otros inconvenientes físicos, emocionales y socioeconómicos, pueden ser experiencias útiles y oportunidades para el progreso anímico.
  Vista desde la perspectiva energética sutil, la conciencia es una forma de energía que evoluciona permanentemente hacia niveles más altos de complejidad y profundización.
 

 
 6) Técnicas de energía sutil

  La medicina china considera al hombre como un microcosmos que forma parte del macrocosmos universal. En consecuencia, los mismos principios que determinan el flujo de la energía en el universo deben ser aplicables al sistema energético humano:
  Para los chinos el universo se halla en un estado de equilibrio dinámico, es decir cambiante, entre polaridades de naturaleza opuesta, cuya esencia caracterizan ellos con las nociones de yin y yang. Un equilibrio correcto de las fuerzas yin y yang en el microcosmos del cuerpo humano es indispensable para alcanzar y mantener la salud.
  Los puntos de acupuntura son accesos que permiten el flujo de energía de los campos energéticos ambientes hacia los campos sutiles de los cuerpos etéreo y físico. Estos puntos se localizan en la piel gracias a su resistencia eléctrica característicamente baja (o su conductividad relativa más alta), lo que es coherente con su papel de puertas de entrada de la energía en el organismo.
  Los puntos de acupuntura absorben del medio la energía vital nutritiva Ch’i, que es de naturaleza sutil, y que se transmite mediante el sistema de los meridianos. En líneas generales éste se divide en doce grupos principales que suministran energía a los órganos principales del cuerpo.
  Según la filosofía china, el flujo de la energía Ch’i a través de los doce pares de meridianos obedece a determinados ciclos bien definidos, que deben reflejar los principios de la naturaleza. En particular, el ciclo de la generación y el de la destrucción indican el patrón de secuencia según el cual pasa la energía Ch’i por los meridianos y, en consecuencia, por los órganos del cuerpo, tanto en la salud como en la enfermedad.
  El flujo de la energía Ch’i obedece además a un patrón biorrítmico. El caudal de energía Ch’i que recorre un meridiano dado alcanza siempre un máximo a determinada hora del día o de la noche. El conocimiento de este patrón temporal puede ser de interés clínico y servir para determinar la hora más indicada para el tratamiento de un meridiano por medio de la acupuntura. Es posible también que esta variación periódica de los flujos de energía vital figure entre los factores causantes de ciertos fenómenos fisiológicos que acusan una fuerte determinación según la hora del día (ritmo circadiano).
  La energía Ch’i se transmite a los órganos por medio de los pares de meridianos dispuestos a los lados derecho e izquierdo del cuerpo. Cuando enferma un órgano o la enfermedad es inminente, los pares de meridianos que alimentan de energía a ese órgano presentan un desequilibrio eléctrico lateral que puede medirse.
  Estos desequilibrios patológicos de los principales órganos del cuerpo pueden determinarse mediante sistemas de diagnóstico tales como la máquina AMI, (“Un sistema computarizado de diagnóstico por electroacupuntura, desarrollado por el doctor Hiroshi Motoyama, que consiste en medir simultáneamente los desequilibrios bioeléctricos en los doce meridianos mayores del organismo, y sirve para revelar qué sistemas orgánicos corren peligro de verse afectados por enfermedades o desequilibrios energéticos”) que mide y compara los puntos de acupuntura terminales de cada uno de los pares de meridianos principales.
  En las exploraciones electrográficas del cuerpo se observa un brillo notable de los puntos de acupuntura cuando el meridiano asociado a éstos está desequilibrado, lo que suministra otro método para la detección de enfermedades.
  Los estímulos aplicados sobre los puntos de acupuntura producen modificaciones en el sistema nervioso (por ejemplo, liberación de endorfinas (“Una familia de proteínas cuya molécula se asemeja a la de la morfina, y se hallan en el cerebro, el sistema nervioso y otros órganos corporales. Se supone que algunas endorfinas intervienen en ciertos procesos de analgesia”) y analgesia “Abolición de la sensación dolorosa”), lo que es debido a que los meridianos influyen indirectamente sobre las vías nerviosas. Probablemente son mediadores de estas modificaciones nerviosas asociadas a la acupuntura las fluctuaciones de los campos de energía en proximidad de los nervios y de las células gliales (“Conjunto de células nerviosas que se encargan de la nutrición, las funciones de soporte y el aislamiento axonal de las neuronas, habiéndose descubierto recientemente que son susceptibles de transportar información, constituyendo una red alternativa basada en la transmisión de señales por corriente continua (analógicas), a diferencia de los impulsos nerviosos, que funcionan con una codificación digital”) que rodean a éstos.
  El sistema de los meridianos de acupuntura es un interfaz diagnóstico así como terapéutico. Los cambios energéticos ocurridos en dicho sistema pueden medirse a través de los puntos de acupuntura para detectar la presencia de enfermedades. Y recíprocamente, puede introducirse energía en el sistema para promover la curación de enfermedades, disponiéndose de toda una variedad de modalidades terapéuticas a este fin, como la estimulación mediante presión digital, aplicación de manos, agujas, corrientes eléctricas, ondas acústicas y luz láser (“Un dispositivo que produce un haz de luz coherente, es decir de ondas luminosas que coinciden en dirección y fase”).



 
   7) Sistemas de energía sutil

 El sistema de los meridianos de acupuntura, dado su vínculo energético entre los cuerpos físico y etéreo, se considera como el interfaz físico etéreo.
  Los sistemas de diagnóstico por electroacupuntura, (“El empleo de corrientes eléctricas débiles para estimular los puntos de acupuntura y sus meridianos correspondientes. Dícese también de los sistemas electrónicos utilizados para medir las características eléctricas de tales puntos a fines de diagnóstico de enfermedades por localización de desequilibrios en los meridianos”) como el aparato de Voll (“Un sistema de diagnóstico por electroacupuntura, desarrollado por el doctor Reinhol Voll, que mide los valores eléctricos de diversos puntos de acupuntura del organismo”) y el de Motoyama, detectan los desequilibrios fisiológicos y energéticos en el organismo por el procedimiento de medir cargas eléctricas en el sistema de meridianos; como éste es parte del interfaz físico-etéreo, los desequilibrios de energía en los puntos de acupuntura reflejan las anomalías en el plano etéreo así como a nivel celular.
  Mientras la máquina AMI explora simultáneamente todos los meridianos principales, el aparato de Voll se utiliza para examinar de uno en uno las características eléctricas de los puntos de acupuntura.
  Los desequilibrios detectados por el sistema de Voll en puntos de acupuntura concretos de un meridiano pueden reflejar desarreglos a diferentes niveles del sistema orgánico alimentado por dicho meridiano.
  El empleo de sistemas de diagnóstico tales como el aparato de Voll para descubrir y tratar las anomalías energéticas del organismo permite sondear hasta las capas más antiguas de la armadura energética; la retirada sucesiva de esas capas, acumuladas durante la exposición a las más variadas agresiones fisiológicas y energéticas, produce el llamado efecto cebolla (“El que actúa sobre el organismo físico a través de varios niveles superiores, gracias a las terapias vibracionales”).
  Las alergias alimentarias, identificadas a veces como reacciones de sensibilidad frente a determinados productos alimenticios, a menudo son debidas a reacciones adversas frente a compuestos químicos fenólicos que se hallan comúnmente en muchos alimentos. Los mecanismos por los que se producen estas reacciones de sensibilidad incluyen una variedad de respuestas inmunológicas y posiblemente también algunas reacciones energéticas sutiles. Y esa susceptibilidad a los alimentos seguramente es responsable de más enfermedades mal diagnosticadas de lo que muchos querrían reconocer.
  El aparato de Voll podría utilizarse para agilizar el diagnóstico de diversas alergias alimentarias, y también facilitaría la rápida determinación de las dosificaciones homeopáticas específicas de alérgeno susceptibles de producir la desensibilización, desapareciendo los síntomas alérgicos.



   8) El fenómeno de la terapia por imposición de manos

 La terapia por imposición de las manos (“Con este término general se designa la curación psíquica -este concepto subsume varios tipos de curación por imposición de las manos, que obedecen a distintas clases de interacción energética; así hay sanadores magnéticos, espirituales, cirujanos psíquicos, etc.- o magnética que opera bajo la presencia directa del terapeuta”) se ha practicado en todo el mundo desde hace miles de años. A finales del siglo XVIII, Franz Mesmer supuso que durante el proceso se produce el intercambio de una sutil energía vital, de naturaleza magnética, entre terapeuta energético y paciente.

  Hacia los años sesenta del siglo veinte, el doctor Bernard Grad reprodujo, en esencia, los descubrimientos de Mesmer en lo concerniente a la energía emitida por las manos. Avanzando un paso más, Grad demostró que esta energía sutil (aplicada al agua de riego) estimulaba el crecimiento de las plantas, así como la cicatrización de las heridas y la prevención del bocio en ratones de laboratorio. Los resultados de Grad en cuanto a la cicatrización de las heridas por la intervención de terapeutas energéticos fueron luego reproducidos en otro laboratorio.
  La doctora Justa Smith corroboró mediante experimentos con soluciones de enzimas (“Molécula proteínica especializada que actúa como catalizador o acelerador de las reacciones químicas corporales en un sentido determinado”) que los campos magnéticos producían efectos cualitativamente parecidos a los de las energías de los terapeutas energéticos.
  La doctora Smith descubrió además que diferentes enzimas reaccionaban en sentidos distintos a las energías del terapeuta energético, pero que el signo del cambio correspondía siempre a las situaciones de mayor salud celular.
  Además la doctora Smith demostró la capacidad de reparación de las enzimas perjudicadas por parte de los terapeutas energéticos, con lo que ponía de manifiesto el comportamiento de entropía negativa de las energías curativas; es decir, que éstas promueven transformaciones en el sentido de aumentar el grado de ordenación de los sistemas. Otras investigaciones con diferentes terapeutas energéticos demostraron la entropía negativa de las energías curativas en sistemas químicos no vivientes.
  En los experimentos de la doctora Smith con los terapeutas energéticos y pese al empleo de magnetómetros sensibles no se pudieron medir los campos magnéticos emanados por aquellos. En cambio, los más modernos y recientes dispositivos SQUID superconductores de interferencia cuántica (“La rama de la física que estudia las características energéticas de la materia a nivel subatómico”) han apreciado aumentos de la emisión magnética, aunque pequeños, cuantificables durante el proceso de la imposición de manos, estableciéndose que la energía vital es efectivamente de naturaleza magnética y parecida a los campos magnéticos de gran intensidad en algunos de sus efectos biológicos, aunque sólo en sentido cualitativo, ya que resulta sumamente difícil detectar ésta energía con los instrumentos convencionales.
  En resumen, la energía de los terapeutas energéticos se caracteriza por su entropía negativa y su semejanza cualitativa con los campos magnéticos, aunque difícilmente pueda ser detectada con el instrumental EM convencional. Esta característica coincide con las predichas para las energías magnetoeléctricas o del espacio/tiempo negativo (“Dícese del dominio de la energía y la sustancia que vibran a velocidad superior a la de la luz, y que seguramente abarca los mundos etéreo y astral de la materia”) por el modelo Tiller-Einstein del espacio/tiempo positivo-negativo(“Un modelo científico de los dominios positivo y negativo del espacio/tiempo, deducido de las ecuaciones de la relatividad einsteiniana, y propuesto por el doctor William Tiller. En este modelo, la energía y la sustancia del espacio/tiempo positivo vibran a velocidad inferior o igual a la de la luz y tienen propiedades eléctricas o electromagnéticas. La energía y la sustancia del espacio/tiempo negativo vibran a velocidad mayor que la de la luz, son de carácter magnético y su naturaleza energética es la magnetoeléctrica”)..
  Las investigaciones de la doctora Dolores Krieger demostraron que las energías de los terapeutas energéticos aumentaban los niveles de hemoglobina (“Macromolécula compleja de los glóbulos rojos de la sangre, que se encarga de transportar el oxígeno a todos los sistemas celulares del organismo”) en personas enfermas, lo mismo que habían aumentado el contenido de clorofila en las plantas tratadas con agua que había sido sometida a la acción de los terapeutas energéticos. Por primera vez se establecía un parámetro experimental que permitía una valoración bioquímica de los efectos de la energía curativa en los humanos.
  La doctora Krieger demostró también la posibilidad de adquirir por aprendizaje las facultades curativas de los terapeutas energéticos. Las enfermeras discípulas suyas lograron aumentar la tasa de hemoglobina de sus pacientes al igual que los terapeutas energéticos naturalmente dotados, demostrando que aquellas facultades son una posibilidad innata de los seres humanos y pueden desarrollarse mediante el aprendizaje y la práctica.
  Las variedades de la energía vital ocupan toda una gama espectral de fenómenos; de tal manera que la imposición de las manos, o lo que podría describirse quizás con más exactitud como curación magnética : (“La variedad de la técnica de imposición de manos que actúa fundamentalmente en el plano etéreo. En otro contexto, dícese también de la utilización terapéutica de campos magnéticos pulsantes para tratar las enfermedades”), tiende a manifestar sus efectos reequilibradores más bien en los planos físico y etéreo, y debe ejecutarse hallándose el terapeuta energético en contacto con los Centros Energéticos del paciente.
  Dejo en claro que las técnicas de imposición de manos no energizan, sino que armonizan. El reiki es una de ellas.



 9) Nuestra relación con los Centros Energéticos

  Los Centros Energéticos principales son centros especializados, transformadores energéticos, que absorben la energía sutil y la distribuyen a las glándulas principales, los centros nerviosos y los órganos corporales.
  La función de los Centros Energéticos guarda relación con diversos aspectos de la conciencia, y sobre todo con las emociones, que afectan al flujo de la energía a través de esos centros. Cuando el cuerpo emocional del individuo presenta una alteración de su campo relacionada con dificultades de la emotividad, esa alteración emocional se traduce en una alteración del flujo de la energía sutil a través de un Centro Energético determinado.

  Para cada uno de los siete Centros Energéticos principales hay un aspecto determinado, emocional y espiritual, que afecta al correcto funcionamiento de aquél. Cuando un individuo padece conflictos emocionales no resueltos de señalada importancia en cualquiera de dichos aspectos, puede producirse la disfunción del Centro Energético. Tales disfunciones tienen como consecuencia la degradación de la región corporal asociada y de sus órganos y glándulas, por insuficiencia del caudal de energía sutil nutritiva. Y si el bloqueo del Centro Energético resulta crónico, andando el tiempo causará desequilibrio celular y enfermedad.
  La alteración del flujo energético sutil a través de los diversos Centros Energéticos es uno de los mecanismos por los que el estrés crónico puede afectar negativamente al cuerpo físico.
  El desequilibrio más crítico es probablemente el que afecta al Centro Energético del corazón, por cuanto éste es el centro que interviene en las cuestiones de la autoestima y el amor al prójimo. El Centro Energético cardíaco alimenta de energía sutil nutritiva el corazón físico y la circulación en general, los pulmones y el timo (“Importante glándula que recibe la alimentación del centro energético cardíaco y contribuye a regular la respuesta inmunitaria”). De tal manera que la disfunción crónica del Centro Energético cardíaco puede contribuir a las dolencias cardíacas, las apoplejías, las enfermedades pulmonares y los diversos tipos de inmunodeficiencia que hacen más vulnerable el organismo a las invasiones bacterianas y víricas, así como a la proliferación de las células cancerosas.
  Dado que los Centros Energéticos aportan energía a los órganos del feto en vías de formación, lo mismo que a los del adulto, los bloqueos emocionales graves que se arrastran de vidas anteriores pueden originar dolencias congénitas, que serán en este caso de origen kármico. Estas enfermedades kármicas pueden manifestarse lo mismo en la primera infancia que retrasar sus efectos a una fase más tardía de la vida.
  El Centro Energético base o raíz es el almacén de una energía natural, aunque potente, llamada la kundalini. Esta energía tiene capacidad para activar todos los Centros Energéticos principales y ajustarlos entre sí y con los centros superiores, aportando la claridad y la iluminación espiritual cuando el despliegue ha tenido lugar en el orden correcto.
  Itzhak Bentov, el doctor Lee Sanella y otros han caracterizado una serie de anomalías físicas que guardan relación con las tensiones no resueltas y con sus efectos sobre el despliegue natural del proceso de la kundalini. A estas anomalías les dieron el nombre de síndrome fisio-kundalini (“Sensación de dolor o malestar con lateralidad izquierda, debido a una súbita relajación del estrés, espontánea o producida durante la estimulación de los Centros Energéticos”).
  Bentov ha descubierto una serie de osciladores sintonizados corporales, que se activan durante la estimulación de la energía Kundalini. Debido a la existencia de un insospechado mecanismo de feedback entre el corazón y la aorta, las micro-oscilaciones del cuerpo que ocurren durante la estimulación de la energía Kundalini son convertidas en estimulación electroacústica de determinados circuitos cerebrales.
  Según el modelo de Bentov, la reiteración de numerosas sesiones de estimulación de la energía Kundalini a lo largo del tiempo llega a establecer una circulación en la corteza sensomotora (“Una franja de la corteza cerebral que controla la actividad de los músculos voluntarios, adyacente a la región dedicada al proceso de las sensaciones, por lo que se aluden a veces en conjunto bajo la denominación de córtex sensuomotor”) que va eliminando gradualmente las tensiones acumuladas en el propio tejido cerebral. Es probable que los síntomas que aquejan a los pacientes agrupados en el complejo fisio-kundalini sean debidos a la descarga de este estrés cerebral.
  Con el tiempo y la perseverancia en la estimulación de la energía Kundalini, se establecen nuevos circuitos neurales que evitan la reaparición de los efectos del estrés y además promueven el estímulo interno de los centros cerebrales del placer. Por tanto, los procesos de estimulación de la energía Kundalini según Bentov es un mecanismo natural para la eliminación del estrés.

 
 
  10) Como se distribuye la energía en el organismo

 La energía accede al organismo en forma de corriente que entra por lo más alto del cráneo, a través del centro energético corona. Puesto que todos los centros energéticos se hallan encadenados por mediación de la médula espinal y de los ganglios nerviosos, según la dirección marcada por el eje central del cuerpo, la energía se propaga hacia abajo, del chacra corona hacia los centros energéticos inferiores, y así se van distribuyendo las corrientes sutiles hacia los órganos adecuados y las partes corporales donde haga falta. Cada centro energético se asocia con una frecuencia vibracional diferente. Podríamos considerar el símil de la luz blanca que entra en un prisma, y que se convierte por refracción en los siete colores del arco iris; la explicación es que la luz blanca contiene las frecuencias de todos esos colores. De una manera parecida entran por el centro energético corona las energías cósmicas, y la refracción de esta corriente superior la descompone en las siete corrientes vibracionales diferentes. Cada color vibracional se distribuye así al centro energético correspondiente, que es el que sintoniza con la frecuencia específica de ese color concreto.

  Las energías sutiles absorbidas por los centros energéticos se transforman en señales endocrinas; todo sucede como en un transformador eléctrico reductor de tensión. Cuando entra en los centros energéticos la energía de naturaleza vibracional superior, o sutil, experimenta una reducción y se transmite como información de un orden más bien fisiológico. Así la energía sutil se convierte en señales hormonales de cada una de las glándulas principales de secreción interna vinculadas con cada centro energético. Las hormonas pasan a la circulación de la sangre en cantidades muy pequeñas, pero de efectos potentes que se hacen sentir en todo el cuerpo físico. Al mismo tiempo, cada centro energético distribuye la energía vital entre varios órganos diferentes que vienen a ocupar la misma localización en el organismo y tienden a resonar con frecuencias similares.
  Cada órgano del cuerpo tiene una frecuencia energética propia. Los órganos de frecuencia similar tienden a agruparse en la misma región del organismo, o los vincula una relación fisiológica especial.
  Por ejemplo, el centro energético del plexo solar guarda relación estrecha con los órganos situados en las inmediaciones de ese plexo, como son el estómago, el páncreas, la vesícula biliar y el hígado. Todos esos órganos desempeñan un papel en la fase inicial de la digestión. Las energías sutiles distribuidas a esos órganos por el centro energético del plexo solar contribuyen a mantener la salud y el buen funcionamiento de ese aspecto de la digestión; y viceversa, cualquier anomalía del flujo de la energía vital asignada al centro energético del plexo solar se manifestará en forma de dificultades del sistema digestivo como la úlcera péptica, los cálculos biliares, la pancreatitis, etc. Importa, pues, conocer las razones de ese funcionamiento anormal del centro energético, por cuanto intervienen procesos emocionales, mentales y espirituales así como pautas de comportamiento.
  Los centros energéticos son algo más que meros transductores pasivos (“Técnicamente, la conversión, transformación o traducción de un tipo de energía o de información a otro. En lo que aquí nos concierne, la transducción implica que una señal energética o eléctrica se convierte en química o viceversa, como sucede en las sinapsis del sistema nervioso”) de la energía sutil. De hecho son órganos de percepción psíquica de nuestros cuerpos sutiles, y cada centro energético se asocia a un tipo diferente de función psíquica. Por ejemplo, el Tercer Ojo o centro energético frontal tiene relación con las facultades intuitivas y la clarividencia. El centro energético de la garganta entra en funcionamiento durante las sesiones de clariaudiencia. El centro energético cardíaco está relacionado con la sensibilidad táctil remota, y así sucesivamente. La razón de que los centros energéticos intervengan en estas facultades de percepción superior estriba en que son puntos de entrada de las energías procedentes de los planos etéreo, astral, mental y otros superiores.
  Cada centro energético representa en realidad un multiplexado de numerosos centros de energía superpuestos de los cuerpos sutiles. En una misma región tenemos un centro energético mental, uno astral y uno etéreo. Las energías sutiles originadas en los niveles vibracionales mentales y otros espirituales superiores se procesan a través del centro energético mental y se reducen al nivel astral; este proceso se repite en el centro energético astral conforme pasan la energía mental demultiplicada y los influjos astrales directos. Luego la energía se transmite al centro energético etéreo desde donde, previa una última reducción, se distribuye por los nadis a los centros especializados, nerviosos y glandulares, del organismo físico.



 11) La dinámica de los centros energéticos y las lecciones espirituales de la evolución personal

 Cada uno de los siete centros energéticos principales ofrece sus enseñanzas concretas, emocionales y espirituales. Los centros energéticos conectan los órganos, las glándulas y los centros nerviosos del organismo con las fuerzas vitales que animan el cuerpo físico. El grado en que cada persona logre asimilar las energías externas inherentes a cada centro determinará el caudal de la energía sutil movilizado en su cuerpo y empleado en mantener la salud de éste. Cuando un centro energético funciona incorrectamente debido a que fue absorbido en su energía, a largo plazo resultarán afectados los órganos que reciben el flujo de energía vital de ese centro energético. La falta total de receptividad de esa energía externa producirá el bloqueo del centro energético y la desvitalización de los órganos afectados.
  La supresión del caudal de energía sutil debida a actividad insuficiente de los centros energéticos puede manifestarse en forma de lesión degenerativa, destructiva o cancerosa en los órganos asociados.


   12) Cada centro energético tiene diversas funciones energéticas asociadas

Los dos centros energéticos inferiores (raíz y sacro) constituyen la zona energética de la pelvis y se consideran de naturaleza fisiológica. Guardan relación con los procesos elementales de la absorción, la asimilación, la excreción y la reproducción. Las cuestiones primordiales que se dilucidan a ese nivel son la materialidad, el arraigo en la tierra, la sexualidad y el instinto de supervivencia, que podríamos calificar como los aspectos más “telúricos” del desarrollo espiritual, si bien es necesario dominarlos y superarlos antes de que la conciencia pueda elevarse a planos más altos. Las fuerzas de energía sutil que se procesan a través de estos dos centros son la kundalini y el caudal pránico en general. Pues, si bien el prana fluye a través de todo el organismo, se considera que el centro energético segundo, o esplénico, es su centro principal de recepción y distribución. Las energías de la kundalini, por supuesto, son la fuente primordial de la creación, la manifestación de la conciencia y la elaboración de conceptos superiores; la energía kundalini y el prana son fuerzas cuyas principales vinculaciones son la interfaz físico-etéreo y las energías etéreas en general.

  Una mujer con bajón energético sexual puede llegar a contaminar su cuerpo físico con síntomas negativos. El tantra, suplementado con dígitopuntura superior en los chakras raíz y sacro, es el camino para revertir ese bajón.


  13) Curación Holística y desplazamiento de paradigmas

La curación holística es una filosofía médica que pretende observar a la persona en su totalidad más que analizar cada una de sus partes, es decir que combina los aspectos físico, mental, emocional y espiritual de la salud y la enfermedad.
  Estamos en víspera de un importante cambio de paradigma que afectará a todas las ciencias, desde la física  hasta la medicina  y  la biología.  Dicho  cambio  implica  la transición  del  modelo  mecanicista newtoniano al paradigma einsteiniano, todavía pendiente de aceptación, del universo complejo,  campo de energía totalmente interconectado.
  La conciencia es una de las formas de la energía. La conciencia evoluciona a medida que se mueve a través  de  los  vehículos físicos  de expresión  e interacciona con ellos,  según enseña  la filosofía de la reencarnación. Ése es el móvil espiritual superior que impulsa el proceso evolutivo biológico propiamente dicho.
  El ser humano es un complejo de mente/cuerpo/espíritu que existe en equilibrio continuo dinámico respecto de dimensiones energéticas superiores de la realidad. Estas energías superiores confieren al vehículo físico las propiedades de vida y expresión creadora.
  El interfaz que regula el flujo de estas energías superiores hacia el marco físico está constituido por el sistema chakra-nadis y por los meridianos de acupuntura, que funcionan en conjunción con la red Bioeléctrica/bioelectrónica (“Dícese de la red eléctrica de transmisión de informaciones y de los mecanismos de reparación celular; también alude a los mecanismos de conmutación electrónica o de control internos de las células o intercelulares”) del organismo.
  En el tratamiento de las afecciones cardíacas existen varios planteamientos. El modelo médico ortodoxo recurre a los fármacos, a la cirugía y a las diversas técnicas no quirúrgicas de angioplastia (“Técnica destinada a eliminar las obstrucciones de los vasos y restablecer el flujo sanguíneo; los procedimientos más habituales son la introducción de un pequeño globo dentro de la arteria para dilatarla, o la destrucción de las placas de colesterol mediante un haz láser”) para mejorar la función cardiaca. Los terapeutas holísticos ofrecen el tratamiento de quelación (“En química la quelación es la fijación de un ion metálico por medio de un complejo orgánico que forma con aquél un compuesto soluble; aquí referida como tratamiento para la arteriosclerosis mediante múltiples infusiones intravenosas de EDTA, un agente quelante”) como terapia de alternativa, además de diversos enfoques de visualización y reducción del estrés. El terapeuta energético subrayaría la necesidad de prestar atención además a los factores de predisposición energética sutil (es decir, a las anomalías en el funcionamiento del Centro Energético cordial), y recomendaría además, para el tratamiento de la dolencia cardiaca, el empleo de diferentes modalidades vibracionales como las esencias florales, los remedios homeopáticos, los tratamientos de equilibrio de los meridianos, la armonización y estimulación de los centros energéticos por imposición de manos, así como la asistencia espiritual encaminada a la recuperación de la armonía interior. En una situación ideal, cada una de las opciones terapéuticas ofrecidas por las diferentes doctrinas se usaría para complementar y reforzar la eficacia de las demás, en vez de fiarlo todo a una sola técnica. Este modelo integrado será el que posiblemente se imponga, hasta que todas las dolencias sean tratadas desde un punto de vista multidisciplinario.
  El modelo de práctica médica vigente en la actualidad recomienda a los médicos una “gestión orientada al problema”, el cual será identificado y tratado sólo después de que el profesional lo haya etiquetado como tal problema. En consecuencia la capacidad para identificar un problema de salud será función de la sensibilidad del instrumental médico empleado en el diagnóstico y de la buena preparación y olfato clínico del terapeuta en cuestión.
  A medida que la medicina actual se condensa en mutuales y demás organizaciones de prestación, en donde los facultativos tienen el tiempo tasado, la práctica se circunscribirá cada vez más al tratamiento de los pacientes agudos y de los problemas superficiales. El médico tendrá poco tiempo que dedicar al estudio de la posible importancia o significado de las quejas aparentemente menores; por tanto le pasarán desapercibidos los fenómenos más sutiles pero susceptibles de conducir a complicaciones graves a largo plazo.
  Las diferencias entre los terapeutas obedecen, en parte, a distintas maneras de definir la salud. Para el médico ortodoxo se trata de conducir al paciente hacia el estado de indiferencia, o ausencia de síntomas; el terapeuta holístico y el vibracional, en cambio, se plantean el bienestar (“Con este término designamos el estado ideal de salud, felicidad, vitalidad y plenitud de todo el completo cuerpo/mente/espíritu. Tal estado de equilibrio se refleja en el aprendizaje permanente, el progreso personal y la manifestación de las capacidades creadoras”) como meta del tratamiento. Considera deseable una mayor individualización de las terapias y los consejos médicos, más allá de la mera desaparición de los síntomas, teniendo en cuenta que el mayor tiempo dedicado al paciente redundará en un estado de salud mejor y la prevención de dolencias futuras.
  Existe una medida óptima de estrés: el Eustrés, “Término acuñado por Hans Selye y que alude a la cantidad óptima de estrés que mantiene la tonicidad y el buen funcionamiento del organismo humano” que el ser humano necesita para mantenerse en buen estado y progresar; pero el estrés resulta disfuncional cuando el cuerpo/mente lo percibe como excesivo. En muchas ocasiones, el estrés psicológico es sólo una función de la mentalidad del individuo, que percibe la situación doméstica o laboral como un peligro para su bienestar.
  Un suplemento de nutrientes sobre una dieta adecuada, la meditación y las técnicas de reducción del estrés: he aquí una vía sencilla y bien eficaz para resolver el estrés emocional y biológico de la vida corriente.
  Hay muchos tipos de estrés insidioso que representan verdaderos peligros para la salud de las personas, entre ellos el psicológico, el alimentario, el cronobiológicoc que se refiere al estudio de cómo los ciclos cronológicos, por ejemplo el ritmo día/noche, afectan a los procesos biológicos, el medioambiental (productos químicos, fármacos, drogas, contaminantes, alergias, intoxicaciones sutiles), el bacteriano y vírico, el electromagnético, el geopático (anomalías de la energía telúrica) e incluso el de los campos psíquicos hostiles.
  El diagnóstico vibracional suele ser el que puede identificar la influencia de los ubicuos estresantes sutiles sobre la salud humana e indicar una terapia conveniente.


  14) Evolución personal

  Los seres humanos son sistemas dinámicos de energía que reflejan pautas evolutivas de desarrollo espiritual. La conciencia humana aprende, progresa y evoluciona sin cesar; a medida que se difunda el conocimiento de este proceso dinámico de cambio se producirá un efecto de propagación que modificará la dinámica energética de la especie humana en conjunto.
  Por lo general las personas que acuden al médico para recibir tratamiento por alguna dolencia no han pensado en la necesidad de cambiar sus propios hábitos de vida y su mentalidad. Pero la interacción médico-paciente sólo surte efectos curativos en la medida en que se produce la cooperación mutua y un nivel más alto de claridad espiritual por ambas partes. Las personas, además de seguir los consejos del médico, deben asumir la responsabilidad de su propia existencia.
  Con frecuencia nuestras enfermedades pueden ser un reflejo simbólico de ciertos estados internos de inquietud emocional, bloqueo espiritual y malestar, que hemos venido utilizando para significar que las enfermedades suelen ser debidas a que el individuo se halla “en discordia”  con algún aspecto de su conciencia superior. Aun cuando concurran factores externos que aportan efectos negativos, éstos sólo llegarán a ser patógenos en virtud de la susceptibilidad previa. A través de los Centros Energéticos nuestros componentes sutiles traducen las dificultades emocionales y espirituales en debilidades fisiológicas, que luego pueden manifestarse en forma de colapso localizado de un sistema del organismo físico, es decir de enfermedad.
  Cuando se presenta la enfermedad, es señal de que hemos restringido el flujo natural de la conciencia creadora y de las energías sutiles a través de nuestro complejo multidimensional cuerpo/mente/espíritu. Es un mensaje simbólico que nos advierte de que algo va mal en el sistema. La zona afectada por la restricción debe reequilibrarse si se quiere obtener una curación duradera.
  Muchas de las cuestiones básicas emocionales/espirituales que preocupan a los seres humanos tienen que ver con las enseñanzas clave de los Centros Energéticos; estas cuestiones energéticas fundamentales son las relativas al arraigo terrenal, la sexualidad, el poder personal, el amor, la voluntad, la expresión creadora, la visión interior y la búsqueda espiritual.
  Cuando el individuo padece un bloqueo, un conflicto que atañe a una de esas cuestiones clave, puede producirse la detención del flujo de energía en el centro energético principal correspondiente, con lo que falta energía vital a los sistemas corporales orgánicos asociados. Estos bloqueos llegan a expresarse como enfermedades si el problema cronifica, lo que a su vez constituye una enseñanza importante para la personalidad encarnada.
  De estas enseñanzas ninguna tan importante como la del Centro Energético cardíaco, la que consiste en la capacidad para expresar libremente el amor hacia uno mismo y hacia los demás, allegados o no. En fin de cuentas la transformación personal y espiritual depende de la apertura y el florecimiento de ese centro cardíaco.
  El miedo y la incomprensión son causas primarias de muchas enfermedades, aflicciones y padecimientos en el mundo. A menudo, cuando estamos funcionando desde los aspectos inferiores de nuestra conciencia, nos cegamos ante nuestros propios temores y los proyectamos hacia el mundo exterior, cuando el verdadero problema reside en el fuero interno. Para disolver y curar esos temores, la clave estriba en eliminar el bloqueo del Centro Energético cardíaco siendo capaces de actuar desde posiciones de amor y perdón. Si abrimos nuestro centro cardíaco y dejamos que pasen libremente las energías espirituales superiores catalizaremos no sólo nuestra propia curación sino incluso la de quienes nos rodean.
  La reencarnación es el sistema por el que las almas, en tanto que particularizaciones de la propia energía de Dios, consiguen evolucionar, aprender y madurar espiritualmente, con lo que contribuyen al acervo total de conocimiento y de experiencia tanto de Dios como de las conciencias individualizadas que son las almas. Dada la conectividad holográfica entre Dios y todos los aspectos de la creación, la inmensa conciencia que es Dios conoce siempre y en todo momento cuanto sucede en todo el universo.
  El sistema de la reencarnación permite que las almas aprendan mediante sus errores y sus nuevas experiencias a través de numerosos tránsitos vitales en organismos físicos. Todas las vivencias, tanto las positivas como las negativas, quedan registradas en el cuerpo causal y pueden afectar por medio del karma al desarrollo de las vidas futuras. Siendo el karma el  principio de la reencarnación, a veces resumido en el aforismo de “lo que se siembra es lo que se recoge”: el sistema energético de créditos y débitos, o de pruebas y equilibrios, mediante el cual puede experimentar el alma toda la gama de las perspectivas de la existencia.
  Las acciones abusivas de una vida aparecen a veces en otra vida posterior convertidas en una minusvalía correspondiente, lo que viene a ser como enseñar los dos lados de la cuestión; de manera similar, la personalidad encarnada que alcanza riqueza, honores e influencia social quizás lo debe, al menos en parte, a las acciones positivas de tránsitos anteriores. La filosofía de la reencarnación permite que admitamos los diversos inconvenientes físicos y socioeconómicos a título de experiencias útiles para el progreso anímico y la maduración espiritual de la personalidad física. Lo que una persona decida hacer en una situación determinada, o si aprovechará o no esa circunstancia para su progreso espiritual, son cuestiones que dependen de la libre voluntad del individuo.
  En el pasado existieron civilizaciones conocedoras de la reencarnación y la anatomía multidimensional humana, entre las que cabe citar la Atlántida, Lemuria y las diversas escuelas del misterio de Egipto y Grecia. Pese a la perversión humana, a las guerras y a la corrupción, siempre han existido avanzadillas secretas dedicadas a conservar las doctrinas de la naturaleza divina de los seres humanos y su extensa gama de posibilidades.
  Los siglos han presenciado la encarnación de grandes Maestros que se consagraron a recordar la Antigua Sabiduría espiritual, como Lao Tsé, Confucio, Sidartha, Zoroastro, Jesús de Nazaret y otros. Sus enseñanzas han dado lugar a numerosas grandes religiones, aunque todas enseñan los mismos principios básicos bajo diferentes acentos y versiones. Todas expresan la misma verdad, aunque en el decurso del tiempo se haya perdido el sentido simbólico de las enseñanzas que pretendían transmitir. Las metáforas de sus mensajes se han tomado en sentido literal, a tal punto que muchas veces queda alterado o perdido el significado espiritual originario.
  La administración de Energía Vital es un enfoque de la curación basado en el concepto einsteiniano de la materia como energía y del ser humano como una serie de campos energéticos complejos en equilibrio dinámico. El campo de la materia física se halla en equilibrio con estos campos de dimensiones superiores (“Con este término aludimos a los sistemas energéticos sutiles que vibran a velocidades hiperlumínicas, por ejemplo a las energías no físicas”) del espacio/tiempo negativo. La actividad de estos campos de frecuencia etérea, astral, mental, causal o superior consiste en suministrar información, estructuración y conocimiento superior a la personalidad encarnada desde sus fuentes espirituales. La finalidad de todo este dispositivo estructural es la de suministrar un vehículo de expresión al alma que ha de progresar a través de sus experiencias en los mundos de la materia.
  La administración de Energía Vital aspira a una reunificación más completa y plena de la personalidad con el Yo Superior. Las modalidades terapéuticas vibracionales tienden a vigorizar las conexiones energéticas entre la personalidad y el alma propiamente dicha, por cuanto reequilibran el complejo cuerpo/mente/espíritu. No todos los recursos de la curación vibracional operan en los planos energéticos más altos, pero la meta y el objeto del terapeuta  vibracional siempre será la de obtener ese ajuste en sus pacientes.
  Con el avance de las técnicas de la Nueva Era, aparecerán sistemas de síntesis de imagen susceptibles de corroborar el esquema de la anatomía multidimensional humana. De ello resultará una mayor aceptación de la administración de Energía Vital por parte de la clase médica establecida.
 

 

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  Los centros energéticos o chakras y sus características
 

  La palabra Chakra es sánscrita y significa Rueda. Se define con ese nombre a una serie de vórtices,
semejantes a ruedas,  que existen en la superficie  de nuestro cuerpo energético.  A través de ellos, la
energía fluye hacia el exterior o hacia nuestro interior.
 

 Los chakras son vórtices (remolinos) esféricos en el cuerpo etérico que acúan como transmisores de energía. Tienen influencia en nuestra actividad en el plano físico a través del funcionamiento de las glándulas endocrinas (glándulas de secreción interna como la tiroides). Estas glándulas afectan a nuestro funcionamiento corporal, al balance mental y a la integridad emocional. Dependiendo del uso que les demos a ellos y a nuestras energías serán constructivos o discordantes.

 
Nuestro cuerpo etérico tiene 7 chakras básicos. No existen chakras buenos o malos, todos son necesarios para las experiencias terrestres como para el mismo proceso de espiritualización.
Voy a explicar la función de cada chakra por separado, pero no hay que olvidarse que funcionan como un todo. En ese todo está el equilibrio.
Cada chakra tiene una función dual, con excepción del primero y el séptimo. Los demás tienen una actividad mundana y otra espiritual.
 
 
 
Chakras Menores
Existen cientos de puntos de energía dentro del cuerpo físico y alrededor de él, inclusive dentro de los vehículos mental, emocional y espiritual. Los más importantes de estos chakras estarían en las manos y en los pies.
  

 
 Chakra 7º  Sahasrara o centro energético Coronario

  Además de promover la percepción extrasensorial cada centro energético va vinculado a diferentes actividades emocionales y espirituales que forman parte del desarrollo de la conciencia humana. Por ejemplo, el centro energético de la corona o séptimo centro energético, considerado como el centro vibracional más elevado del cuerpo sutil, se asocia con la búsqueda interior profunda, en lo que suele llamarse el tránsito espiritual. Este centro energético entra en actividad cuando el individuo se plantea una vía de perfección religiosa o espiritual, una interrogación acerca del sentido de la vida, una exploración del propio fuero íntimo en busca de los propios orígenes como ser consciente y perfectible.
  La apertura del centro energético corona permite acceder a los estados más elevados de la conciencia. Su activación consciente equivale a la fase inicial del camino ascendente hacia el estado de perfección espiritual.
  Considerado en el plano físico, este centro energético guarda relación con la actividad de la corteza cerebral y el funcionamiento del sistema nervioso en general. Activado apropiadamente, el centro energético corona influye sobre la sincronización entre los hemisferios cerebrales (“Las mitades derecha e izquierda de la corteza cerebral, donde residen las funciones cerebrales superiores. El hemisferio izquierdo controla el pensamiento analítico y lineal, mientras que el hemisferio derecho controla los procesos del pensamiento intuitivo, simbólico y no lineal”). Asimismo tiene una íntima relación con la glándula pineal. Una activación completa de este centro energético en el individuo exige el equilibrio previo de cuerpo, mente y espíritu. En el sujeto cuyo centro energético corona se ha abierto plenamente, el séptimo centro queda representado como polaridad energética entre la glándula pineal y los hemisferios cerebrales derecho e izquierdo. Las anomalías del flujo energético a nivel del centro energético corona se manifiestan como disfunciones cerebrales de diferentes tipos, entre las que podemos citar las psicosis.
 
 

 Chakra 6º Agnya (Ajna) o centro energético Frontal  (del Tercer Ojo)

  Es el centro energético frontal, también llamado Tercer Ojo, cuya localización exacta corresponde al entrecejo. Son bien conocidas las asociaciones místicas tradicionales de este centro con la glándula pineal. Desde el punto de vista evolutivo es interesante observar que en algunas especies inferiores, como los reptiles, la pineal aparece asociada todavía con un Tercer Ojo rudimentario, aunque a veces provisto de cristalino y de células fotorreceptoras como las de la retina. Cuando está activado el séptimo centro energético, el sexto o frontal se representa como una polaridad de energías entre la glándula pituitaria y la pineal. En caso contrario, es decir si está cerrado el séptimo, el centro energético frontal queda representado por la pituitaria y el bulbo raquídeo o médula oblongata.
  El centro energético del Tercer Ojo es la sede de la intuición y el órgano sutil que interviene en la clarividencia. El grado de actividad de este centro energético es una indicación de la agudeza intuitiva de un individuo así como de su sabiduría consciente. Es uno de los centros psíquicos susceptibles de perfeccionamiento gradual por medio de diversos tipos de práctica meditativa. El individuo que ha logrado desarrollar en gran medida el centro energético del Tercer Ojo posee la facultad de visión interior, un aspecto de la conciencia relacionado con la introspección. En este tipo de visión, el Tercer Ojo favorece la exploración interior consciente y de este proceso resultan conceptos más claros y nuevas perspectivas sobre las causas últimas tanto del acontecer exterior como del interior. Clarividencia quiere decir, como su propio nombre indica, “visión clara”. Físicamente el centro energético frontal tiene asociación con la glándula pineal, la pituitaria y la médula espinal, así como con los ojos, los oídos, la nariz y los senos faciales. Las enfermedades debidas a disfunción del centro energético frontal pueden ser debidas a una actitud, por parte del individuo, de no querer ver lo que concierne a su desarrollo espiritual. Las dificultades asociadas con los bloqueos de la energía (“ Con ese término general describimos la interrupción del flujo natural de las energías sutiles a través del sistema energético humano, debido con frecuencia a la función anómala de uno o varios Centros Energéticos”) a nivel del centro energético del Tercer Ojo pueden manifestarse físicamente en forma de dolencias tan variadas como la sinusitis, las cataratas, e importantes desequilibrios endocrinos (por la asociación de dicho centro con la glándula pituitaria).
 

 

 Chakra 5º Vishuddi o centro energético Garganta  (Laríngeo)

   El quinto centro energético  es el de la garganta  y tiene influencia sobre los principales órganos  y estructuras de la región del cuello, entre las cuales figuran las glándulas tiroides (“Pequeña glándula en forma de mariposa que reside en la garganta y produce la tiroxina, una hormona que regula el ritmo metabólico del organismo”) y paratiroides, la cavidad bucal, las cuerdas vocales y la tráquea, así como las vértebras cervicales. Existe además una asociación entre el centro energético de la garganta y el sistema nervioso parasimpático. La mayor parte de la división parasimpática del sistema nervioso autónomo (“El sistema nervioso regulador automático/inconsciente del organismo; se divide en sistema simpático y parasimpático”) deriva del décimo nervio craneal, también llamado el vago, que emerge del bulbo y desciende por el cuello pasando a inervar el corazón, los pulmones y los órganos del abdomen. La glándula paratiroides, que recibe energía de ese centro, regula el metabolismo del calcio en las células óseas por medio de la hormona paratiroidea que segrega. En cuanto a la tiroides, además de producir la hormona tiroidea, que es una reguladora general de la actividad metabólica de las células corporales, segrega también la tirocalcitonina, una hormona que afecta al metabolismo del calcio y de los huesos en sentido opuesto al de la hormona paratiroidea. Como el centro energético de la garganta energiza tanto la glándula tiroides como la paratiroides, constituyendo ambas el sistema de regulación del metabolismo del calcio en las células de los huesos, obviamente el centro energético de la garganta afecta a la condición del esqueleto en general. Por su vecindad posicional con la cavidad bucal y las cuerdas vocales, se le atribuye simbólicamente una influencia sobre la capacidad de comunicación. En el ámbito psíquico, el centro energético de la garganta funciona durante la clariaudiencia o facultad de oír en el plano astral.
  A nivel fisicoemocional, una disfunción del centro energético de la garganta puede correlacionarse con ciertas dificultades de comunicación, como las que padecen especialmente aquellos individuos que no saben expresarse en presencia de los demás. Esta dificultad para manifestarse puede tener su origen en una amplia gama de causas emocionales. El centro energético de la garganta es también la sede de algunas facultades creadoras superiores como la oratoria y el canto. En efecto la voz y el habla son los medios vibracionales que nos sirven para comunicarnos con los demás y dar expresión verbal a nuestras ideas. Hallaremos bloqueos de este centro energético en aquellas personas que no saben expresarse con originalidad o que sufren excesivas dificultades para hacerlo.
  Aparte de la comunicación, a veces se identifica este centro energético como la sede de la voluntad. La dificultad para expresarse podría interpretarse en tal caso como falta de voluntad para comunicar lo que uno verdaderamente siente. La actividad del centro energético de la garganta en relación con la voluntad puede afectar también a la capacidad del individuo para admitir conscientemente sus propias necesidades. Las anomalías del flujo de energía vital en este caso se manifiestan como dolencias debidas a anomalías disfuncionales de la actividad celular en las estructuras controladas por el centro energético de la garganta; ejemplos de estas enfermedades por desequilibrio del quinto centro energético son la laringitis, la tiroiditis, las tumoraciones de la paratiroides y el cáncer de laringe.
  El tipo de dolencia que se manifieste en las estructuras físicas adyacentes al centro energético de la garganta dependerá de una serie de factores distintos. Aunque la causa más comúnmente hallada son los bloqueos del flujo de energía que recorre un determinado centro energético, a veces la condición opuesta puede originar también un desequilibrio, es decir que se puede enfermar a consecuencia de una excesiva plétora de energía en un centro energético. Así, mientras un déficit en la energía afluente a un centro energético suscita por lo general una enfermedad degenerativa o las anomalías relacionadas con la atrofia de la función (el hipotiroidismo “Estado de hiperactividad de la glándula tiroides que suele manifestarse en forma de agitación, nerviosismo y sudoración excesiva”  en este caso), la sobreabundancia de energía, en cambio, producirá inflamaciones (tiroiditis asociada a hipertiroidismo) o neoplasias (carcinoma tiroideo).
  

 Chakra 4º Anahata o centro energético Corazón  (Cardíaco)

  Es el llamado centro del corazón o centro energético cardíaco, tal vez uno de los más importantes de nuestra anatomía energética sutil.  La razón de que el centro cardiaco  sea tan significativo  es que la apertura del centro energético correspondiente correlaciona directamente con la capacidad del individuo para expresar el amor. Entendiendo por amor tanto la autoestima como la expresión del amor a los demás. En efecto el amor puede manifestarse como cariño fraternal hacia los amigos, caridad para con el prójimo, pasión de amantes, y también como amor espiritual. Por supuesto la forma más elevada del amor espiritual es el amor al prójimo sin condiciones. Las lecciones del amor figuran entre las más indispensables que debemos aprender durante el tiempo que tenemos asignado a nuestro tránsito en el plano físico. El que experimente dificultades en asimilar esas enseñanzas podrá adolecer de anomalías en el funcionamiento del centro energético cardiaco y éstas, a su vez, afectarán al corazón físico.
  Ya que son muchos los que no logran desarrollar las posibilidades latentes en el centro energético cardíaco o “centro del corazón interior”, como también se le llama, no es de extrañar la tremenda incidencia de las enfermedades cardíacas en la sociedad moderna ni el índice de mortalidad consiguiente. Aunque el hábito de fumar y las elevadas tasas de colesterol ciertamente contribuyen también como causas de las dolencias del corazón, no deja de ser paradójico que los médicos (y los mismos pacientes) no hayan reconocido todavía la importancia del vínculo energético entre dolencias cardíacas, anomalías del centro energético del corazón e incapacidad para expresar y vivir el amor. Y decimos los pacientes, porque si éstos fuesen conscientes de tan importante relación psicoenergética, el médico podría corregir con más facilidad las actitudes y las mentalidades que contribuyeron a crear, ante todo, aquellos desequilibrios energéticos de donde resultó la predisposición a padecer el mal cardíaco.
  Además de su relación con el corazón físico, el centro energético cardíaco aporta energía sutil nutritiva a los conductos bronquiales, a los pulmones, a los senos, y además afecta al funcionamiento de todo el sistema circulatorio. Además de contribuir a la enfermedad coronaria y a los ataques cardíacos, los desequilibrios del centro energético cardíaco pueden ser el origen de otras afecciones circulatorias como las embolias, y recordemos que son miles las personas que sufren todos los años este tipo de accidente vascular. Una disminución de la energía transmitida a través del centro energético cardíaco puede manifestarse en el estancamiento del flujo sanguíneo que atraviesa el corazón físico enfermo, fenómeno que conduce a la formación de coágulos, y si uno de éstos, impulsado por la circulación, se aloja en alguna de las arteriolas del cerebro impidiendo que una parte del tejido cerebral reciba el oxígeno y el prana (“Antiguo término hindú o de yoga que designa una energía nutritiva sutil que se absorbe con la respiración”) indispensables para la vida, se produce la apoplejía. (Esta descripción es sólo un ejemplo de cómo la disfunción energética a nivel del centro cardíaco puede manifestarse en forma de accidente vascular). El flujo de energía sutil que pasa por el centro energético cardíaco refleja la importancia del amor en la vida individual y el grado de atención que una determinada persona concede a ese aspecto.
  Se comprenden mejor, a la luz de esta información, ciertas enfermedades infantiles como el asma; el niño asmático suele proceder de familias en donde la madre (o el padre) ha exagerado la función tutelar. Al nivel simbólico y al literal, es una expresión desequilibrada del amor de uno de sus progenitores lo que ahoga a la criatura. Por cuanto el centro energético cardíaco influye sobre los bronquios, el desequilibrio de energía provoca una tendencia al espasmo de las vías respiratorias, con las consiguientes dificultades de ventilación, sobre todo durante los períodos de conflicto emocional íntimo.
  Las energías de los cuatro centros energéticos inferiores simbolizan los cuatro elementos planetarios de la Antigüedad: la tierra, el agua, el fuego y el aire. Debido a su asociación con el corazón, y los pulmones, que absorben el oxígeno y hacen que éste circule por todo el organismo, el centro energético cardíaco representa simbólicamente el elemento “aire” así como el del plexo solar se enlaza con el fuego, el umbilical representa el agua y el centro energético raíz simboliza el elemento tierra. De esta manera, mientras los cuatro centros energéticos inferiores representan el plano físico, los otros tres, que son los superiores, se relacionan simbólicamente con el elemento etéreo y los demás planos superiores de la creación. El centro cardíaco viene a ser un centro energético de transición, o mediador entre las energías materiales e inferiores y las espirituales o superiores. Al igual que el aire, el centro cardíaco ocupa simbólicamente una posición intermedia entre el cielo y la tierra.
  Por cuanto el centro energético del corazón se asocia íntimamente con las expresiones del amor y de la compasión, también tiene la consideración de importante centro alimenticio, y no sólo en sentido material. En efecto muchos de los órganos vinculados ayudan a nutrir y promover la vida y la vitalidad en el resto del organismo. Los pulmones aspiran el oxígeno y el prana de la atmósfera. El corazón bombea la sangre hacia los pulmones, donde absorbe el oxígeno y el prana para distribuirlo a los demás órganos corporales. El sistema digestivo añade otros nutrientes a la corriente sanguínea, para que la circulación los distribuya asimismo por todo el cuerpo. Las mamas están localizadas a nivel del centro energético cardíaco, y constituyen un ejemplo muy señalado por ser quizás el único órgano que responde a la función exclusiva de alimentar a otro ser.
  Del desarrollo de la facultad de amar a través del centro energético cardíaco depende la facultad de atenderse uno mismo así como a los demás. Conforme se va haciendo uno capaz de amar incondicionalmente a la propia persona así como a 1os demás, se abre el centro energético del corazón y se facilita el flujo de la energía nutritiva hacia los órganos que de aquél dependen. El asma es una enfermedad relacionada con una disfunción del centro cardíaco que puede ser resultado de un exceso de atenciones por parte de otra persona. Cuando el niño es objeto de un exceso de dedicación amorosa, hasta el punto de resultar sofocado su albedrío independiente, el desequilibrio del centro cardíaco origina estímulos anómalos que afectan al árbol bronquial y dificultan el aporte del oxígeno indispensable para la vida. Demasiado de lo bueno puede ser perjudicial, lo mismo que una sobrealimentación inoportuna puede producir efectos indeseables. El exceso de atenciones, por buena que sea la intención, abruma y provoca la sensación física de ahogo a través del mecanismo que acabamos de explicar.
  En el ámbito psicológico el centro energético del corazón rige las emociones que nos atraen hacia otras personas con las que mantenemos algún tipo de relación de amor. A menudo, la aparición de la persona amada suscita en nosotros como una oleada de calor y energía en el pecho, al tiempo que experimentamos fuertes sentimientos positivos hacia esa persona. Estas sensaciones activadas a impulsos del amor, y especialmente del amor romántico, hacen que percibamos de manera consciente el flujo energético que recorre en ese momento el centro energético del corazón. De esta manera, las atenciones hacia los demás nacen de sentimientos como el amor, la compasión o la empatía; la facultad de ser atento para con otros es una manifestación de ese género de emociones, y al mismo tiempo el reconocimiento implícito de la necesidad que ellos también tienen de evolucionar y progresar física y espiritualmente. El desarrollo de los sentimientos de compasión y empatia ante el prójimo es uno de los primeros pasos en el camino que conduce a la apertura del centro energético cardiaco y al desarrollo de la conciencia superior. Cuando hallemos ausentes esos elementos en una personalidad, podemos estar seguros de que existe algún bloqueo de aquél.
  De entre los vínculos entre el centro energético del corazón y los diversos órganos físicos, se atribuye gran importancia a la asociación de dicho centro con el timo. Durante mucho tiempo los médicos creyeron que era normal que esta glándula se atrofiase en tamaño y funcionalidad a edad temprana. Pero es posible que esta opinión deba ser considerablemente revisada, a medida que los facultativos comprendan la relación energética entre la glándula timo y el centro energético cardíaco. Quizás sea necesario admitir que la involución del timo con la edad no es un fenómeno universal. En los que presentan la atrofia del timo, después de la adolescencia podríamos encontrar una relación entre los sentimientos de soledad, la depresión, el bloqueo del centro energético cardíaco y la pérdida de aquella función glandular. Los estudiosos del nuevo campo de la psiconeuroinmunología (“Una rama de la medicina, de reciente aparición, que estudia las interacciones entre la mente, el cuerpo y el sistema inmunitario, tanto en la
salud como en la enfermedad”) todavía no han estudiado a fondo los vínculos energéticos sutiles entre
la emotividad y la función inmunológica, aunque sí saben algo acerca de las relaciones fisiológicas entre las emociones humanas y la enfermedad. Queda sin embargo un aspecto esotérico de la inmunología en espera de ser plenamente comprendido.
  Hoy la ciencia médica reconoce que el timo desempeña un papel importante en la regulación de la respuesta inmunitaria.  Anteriormente se creía  que el timo sólo tenía plena funcionalidad durante la primera infancia, cuando se produce la preprogramación de los llamados linfocitos T en orden a sus especiales funciones inmunológicas; esta activación tiene lugar durante una fase crítica del crecimiento
y mientras aquellos residen en dicha glándula. Hoy en cambio la investigación empieza a descubrir las poderosas hormonas reguladoras que segrega el timo; esas hormonas, llamadas timosinas, influyen durante toda la vida sobre la capacidad del individuo para combatir las enfermedades, por cuanto potencian la actividad de diferentes tipos de linfocitos T.
  La regulación por la actividad hormonal del timo seguramente tiene algo que ver también con las enfermedades de índole inmunológica. Así por ejemplo la artritis reumatoide, que es una enfermedad autoinmune (“Un tipo de reacción inmunitaria en que el organismo se ataca a sí mismo fabricando anticuerpos contra los llamados “auto-antígenos”. En la actualidad se cree que las células T-supresoras, un tipo especial de linfocitos, inhiben normalmente esta especie de reacción; por consiguiente, las enfermedades autoinmunes pueden ser debidas a una alteración de la actividad de las células T-supresoras”) en la que el cuerpo literalmente se ataca a sí mismo, ha sido tratada con carácter experimental irradiando el timo a fin de moderar su actividad. Son muchas las dolencias que resultan de alteraciones de la función inmunitaria, pero además la ciencia empieza a descubrir la presencia de componentes inmunológicos en otras muchas enfermedades que no se sospechaba relacionados con este aspecto fisiológico. Recientemente; por ejemplo, se han hallado indicios de una contribución inmunológica a la enfermedad coronaria, problema que en otros tiempos se atribuía fundamentalmente al colesterol, a la dieta, a la hipertensión y al hábito de fumar. En muchas anomalías caracterizadas por la hipofunción de un órgano, como la insuficiencia ovárica primaria, la atrofia suprarrenal y algunos tipos de diabetes infantil, se han hallado últimamente relaciones con ciertos mecanismos autoinmunes de destrucción glandular. Lo que importa recordar de todo esto es que la regulación inmunitaria por el timo puede afectar a un gran número de dolencias distintas, y recibe a su vez el influjo de la actividad del centro energético cardíaco.
  Los diversos investigadores que han examinado las relaciones entre la emotividad y las enfermedades han descubierto una fuerte correlación entre la depresión, los sentimientos de pena y la supresión de las defensas corporales. Varios psicólogos se han dedicado a estudiar los antecedentes de los enfermos de cáncer y han observado coincidencias interesantes, en particular que muchos de estos pacientes sufrieron depresiones antes de manifestarse en ellos las neoplasias malignas. Según los estudios de Leshan, a muchos pacientes de cáncer se les diagnosticó la enfermedad entre doce y dieciocho meses después de haber perdido a su cónyuge. En estos pacientes, es probable que un estado prolongado de pena y depresión haya originado la supresión de la actividad inmunitaria normal, que detecta y elimina las células cancerosas esporádicas. De tal manera que la inmunodepresión de estas personas atribuladas habría permitido la formación de masas de células tumorales voluminosas y menos vulnerables a las defensas del organismo.
  Como se sabe, los que sufren una inmunodeficiencia de cualquier origen se hallan más expuestos a la aparición de neoplasias malignas. En algunos trabajos oncológicos se ha anotado que los padres de niños leucémicos suelen manifestar, además de la reacción de pena consiguiente a la comunicación del diagnóstico, síntomas de inmunosupresión (“ Supresión de las defensas naturales del organismo, es decir colapso de la resistencia del anfitrión que es el conjunto de los factores de un organismo que le confieren una relativa inmunidad a las enfermedades; entre estos elementos figura la vitalidad general, así como la funcionalidad de los diversos aspectos del sistema inmunitario- que puede ser debida a gran número de factores químicos, emocionales o energéticos”) detectable a través de los análisis de sangre. Es un ejemplo de los potentes efectos negativos que las tribulaciones, el estrés y la depresión pueden ejercer sobre los sistemas inmunitarios de defensa del organismo.
  No han advertido todavía los investigadores que el flujo de la energía sutil del prana a través del centro energético cardiaco es un factor esencial para el buen funcionamiento del timo y, por tanto, para la plena funcionalidad inmunitaria del organismo. La glándula en cuestión produce factores hormonales como la timopoetina y otras timosinas, que regulan la actividad de los linfocitos (“Un tipo de glóbulo blanco que interviene en la respuesta inmunitaria”) en todo el cuerpo; la actividad del timo afecta en particular a una subpoblación de esas células hemáticas, la de los linfocitos T o células T, que precisamente reciben ese nombre porque adquieren sus especiales facultades durante su residencia en el timo, correspondiente a una fase temprana de programación celular.
  Las investigaciones recientes en inmunología han descubierto varias subcategorías de los linfocitos T, llamadas T-coadyuvantes y T-supresores. Las células T-coadyuvantes contribuyen a la producción de anticuerpos (“Una proteína especializada producida por el sistema inmunitario, que se combina con el revestimiento molecular de los invasores identificados como “intrusos”; esta combinación inicia diversos mecanismos dirigidos a destruir o eliminar la sustancia extraña”) y colaboran con otros tipos de células defensoras en la eliminación de las proteínas extrañas, “no propias”, y demás invasiones. Existen también otros linfocitos especiales llamados células T-destructoras cuya acción conocida estriba en la eliminación de células cancerosas; así participan en la función de vigilancia del sistema inmunitario, que se encarga de eliminar del organismo estas células anormales, además de los invasores externos como las bacterias y los virus (“Agente infeccioso submicroscópico constituido, en esencia, por un revestimiento proteínico especializado que recubre una secuencia de material genético (ARN o ADN)”). El subgrupo más importante de las células T quizás sea el de las T-supresoras, que son las que regulan la intensidad de la respuesta inmunitaria y vigilan a los demás linfocitos, como si dijéramos, para garantizar que ataquen sólo a las proteínas no propias. Cuando se pierde esta función autorreguladora por disminución del número y de la actividad de estas células T-supresoras, lo que sucede es que el organismo empieza a atacarse a sí mismo. Últimamente la ciencia médica identifica una cantidad cada vez mayor de estas enfermedades de origen “autoinmune”.
  En efecto, es muy amplia la variedad de las dolencias que tienen por origen común el mecanismo autoinmune. En estas enfermedades, los linfocitos producen anticuerpos contra las proteínas celulares de diversos órganos propios, e incluso contra el ADN, de donde resulta que el cuerpo se ataca inmunológicamente a sí mismo. Una de las más comunes, de entre esas dolencias, es la artritis reumatoide; otros ejemplos de enfermedades que responden a un componente autoinmune, cuando menos, son el lupus, la miastenia grave, la esclerosis múltiple, la tiroiditis de Hashimoto, la insuficiencia suprarrenal, la insuficiencia ovárica primaria y quizás ciertos tipos de diabetes infantil.
  En algunas de estas enfermedades los indicios sugieren la presencia de un factor concurrente vírico. Algunos investigadores han sugerido que algunos virus pueden ser capaces de alterar determinadas proteínas haciendo que parezcan ajenas a los agentes del sistema inmunitario. Las proteínas de aspecto ajeno desencadenarían entonces un ataque inmunitario general contra todo el grupo de proteínas en cuestión, tanto las alteradas por el virus como las normales del organismo. Se dispone de indicios que permiten sospechar una predisposición a estas infecciones víricas, o por lo menos a las reacciones autoinmunes que éstas desencadenan. En algunos pacientes de diabetes juvenil, por ejemplo, se descubrieron síntomas de invasión vírica del tejido pancreático, acompañadas de la presencia de autoanticuerpos perjudiciales para esos mismos tejidos; los pacientes presentaban además antecedentes genéticos comunes tipificados por el análisis HLA, que es una medida de la semejanza inmunológica entre individuos distintos. En la circulación sanguínea de estos niños diabéticos se hallaban anticuerpos dirigidos contra las células del páncreas que producen la insulina.
  Otros virus incluso consiguen alojarse en las propias células del sistema inmunitario y destruirlas, anulando la capacidad del organismo para defenderse frente a los invasores. El SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida) es una de las enfermedades más polémicas de nuestra época, que cursa acompañada de inmunosupresión, pérdida de linfocitos T e infecciones víricas múltiples. Como enfermedad responde a la presencia de un virus que tiene especial afinidad hacia los linfocitos T; informaciones recientes sugieren la existencia de otros virus, relacionados con el herpes, que manifiestan predilección por los linfocitos B, los encargados de la producción de anticuerpos.
  Con independencia del hecho de que el proceso patógeno sea iniciado por unos virus, hay que contar con diversos factores energéticos sutiles que explican quizás la predisposición de ciertos individuos a contraer la inmunodeficiencia cuando se hallan expuestos a dichos agentes patógenos. Obviamente, no todas las personas que entran en contacto con un virus contraen la enfermedad; los individuos dotados de defensas inmunológicas fuertes tal vez logran eliminar de su organismo ese virus, o los efectos del mismo quedarán reducidos a una sintomatología gripal leve.
  Uno de los factores que contribuyen en grado significativo a la fortaleza de la respuesta inmunitaria es el caudal de energía sutil que por medio del centro energético cardíaco acude a potenciar la glándula timo. Cuando se produce un bloqueo del flujo pránico a través del centro energético cardíaco debido a dificultades en la manifestación de la autoestima o el amor a los demás, la energía vital aportada al timo disminuye, lo que puede expresarse a veces como enfermedad de la propia glándula. En la miastenia grave, por ejemplo, una dolencia autoinmune causada por anticuerpos que atacan la conexión neuromuscular (y originan en consecuencia una debilidad muscular generalizada), se halla una frecuente incidencia del timoma, un tipo de tumor maligno del timo.
  Estando perjudicada la función del timo (por bloqueos del centro energético cordial) puede darse asimismo una mayor susceptibilidad a graves infecciones víricas de todo tipo. Como hemos visto, ciertas categorías de linfocitos T tienen la misión concreta de eliminar virus del organismo; es posible que la actividad de esas células se halle controlada a distancia por factores hormonales presentes en la circulación sanguínea y suscitados por los linfocitos (las llamadas linfocinas) así como por las hormonas reguladoras del sistema inmunitario (como la timosina), segregadas por el timo. En los individuos que padecen deficiencias inmunológicas atribuibles a un determinado virus, el bloqueo del centro energético cardíaco puede haber motivado una predisposición energética sutil a contraer la afección correspondiente. En cuyo caso la infección vírica habría desempeñado un papel secundario, aunque importante, en la aparición de la anomalía autoinmune o de otras enfermedades vinculadas a la inmunodeficiencia.
  La predisposición enfermiza por lo visto guarda relación con ciertos desequilibrios emocionales relativos al temperamento del amor y el centro energético del corazón. Los bloqueos de este centro energético pueden resultar de una incapacidad para expresar el amor, pero otra causa todavía más importante de tal disfunción es, con frecuencia, la falta de autoestima. La capacidad para amarse a sí mismo es más importante de lo que reconocen muchos psicólogos. La persistencia de una autoimagen negativa, la ausencia del sentimiento de valía personal, son responsables, en medida hoy por hoy todavía insospechada por muchos, de daños fisiológicos debidos a la presencia de anomalías insidiosas en el eje centro energético cardíaco(glándula timo).
  En muchos casos serán varios los centros energéticos afligidos por un funcionamiento anómalo. Por ejemplo, el bloqueo de la energía en un centro energético puede originar un flujo excesivamente pletórico hacia el centro energético inmediato inferior; un bloqueo a nivel del centro energético cardíaco, por ejemplo, haría pasar un exceso de energía al centro energético del plexo solar, que es el que sigue a aquél. Ocurre como cuando un amasijo de troncos y barro obstruye el cauce de un río y origina el desbordamiento de éste y la inundación de las comarcas circunvecinas. Las energías de la kundalini generadas en el centro energético raíz tienden a ascender por la columna vertebral hacia la corona, e inyectan energía en los demás centros energéticos que van hallando por el camino; de tal manera que un bloqueo en los centros superiores puede originar congestión y desbordamiento de las energías en los centros energéticos inferiores, como único medio para evacuar el exceso. Otras veces la enfermedad va asociada con un funcionamiento anómalo de varios centros energéticos porque el individuo padece múltiples bloqueos de la emotividad; cada obstrucción de un centro energético se relaciona con un conflicto emocional que aquél no ha sabido resolver adecuadamente. Enfrentamos los diferentes problemas emocionales y espirituales a distintos niveles de modulación de la energía de los centros energéticos.
  Muchos de los conflictos emocionales y espirituales que plantean dificultades insolubles a los individuos, acompañadas de disfunciones a nivel del centro energético cardíaco, giran alrededor de dos emociones de signo opuesto, la tristeza y la alegría. Aquél cuya vida está llena de lutos, melancolía, tristeza, soledad, depresión e incapacidad para expresar sus sentimientos hacia los que le rodean, indudablemente padecerá desequilibrios del centro energético cardíaco, como se observa entre parientes muy allegados o esposos que han de enfrentarse a una separación, o entre los familiares de un ser querido cuya enfermedad ha llegado a la fase terminal. La depresión subsiguiente al fallecimiento de una persona allegada puede ir acompañada de remordimientos por no haber actuado adecuadamente o a tiempo para evitar la tragedia; lo que se traduce a menudo en incapacidad propia para disfrutar de las alegrías de la vida, aun cuando aquellos remordimientos estuviesen totalmente injustificados. Son los desequilibrios emocionales y espirituales de este género los que producen bloqueos del flujo de la energía a través del centro energético cardíaco, que tal vez se manifiesten más adelante como disfunción celular a nivel del timo.
  Teniendo en cuenta que esta glándula afecta a los diversos tipos de células que combaten las enfermedades en todo el organismo, el funcionamiento anómalo de aquélla es susceptible de originar una depresión general de las defensas inmunitarias promoviendo, por consiguiente, la vulnerabilidad a toda clase de infecciones bacterianas y víricas. En razón de los efectos del timo sobre determinados tipos de linfocitos, especialmente los T-coadyuvantes y los T-supresores, cabe sospechar la aparición de daños más específicos en órganos corporales concretos.
  Precisamente las células T-supresoras han sido objeto de intensa atención últimamente por parte de los investigadores, deseosos de comprender la intervención de aquellas en las enfermedades autoinmunes. Si estas células T-supresoras no evitan que el cuerpo se combata a sí mismo, el sistema inmunitario puede entrar en un círculo vicioso, con el perjuicio consiguiente para aquellos órganos del cuerpo que han quedado desprotegidos.
  La inmunosupresión selectiva de la función de las células T-supresoras, debida a diversos tipos de disfunción del eje centro energético cardíaco-timo, pueden afectar igualmente a otros centros endocrinos del organismo. Pueden verse los efectos de acción autoinmune remota sobre los centros glandulares en dolencias tales como la tiroiditis autoinmune, la insuficiencia suprarrenal y la insuficiencia ovárica primaria. En los procesos patológicos donde un centro endocrino determinado aparece afectado por la destrucción autoinmune, probablemente el individuo enfermo padece desequilibrios de la energía sutil tanto en el centro energético cardíaco como en el centro glandular cuyas funciones hormonales se han revelado perjudicadas por la anomalía inmunológica. Por ejemplo, la insuficiencia suprarrenal autoinmune puede suponer disfunciones de ambos centros energéticos, el del plexo solar y el cardíaco. De manera similar, la insuficiencia ovárica primaria se retrotrae seguramente a bloqueos de la energía sutil tanto en el centro energético del corazón como en el gonadal o sacro.
  Otra afección del sistema inmunitario probablemente asociada con bloqueos del centro energético gonadal es el SIDA. Una de las primeras correlaciones que se hallaron entre el SIDA y los homosexuales fue la gran frecuencia de los contactos sexuales en quienes luego resultaron afligidos por la enfermedad, muchos de los cuales pertenecían a la comunidad gay. La promiscuidad, es decir el revolotear de una pareja sexual a otra sin sentimientos genuinos de amor, sin duda debió enfocar un exceso de energía hacia el centro gonadal. Evidentemente, esto por sí solo no sería la causa única del SIDA; pero la mayor frecuencia de los contactos sexuales implicaba un mayor riesgo de exposición al virus de la inmunodeficiencia adquirida. Por otra parte, las actitudes negativas frente a la homosexualidad que predominan en nuestra cultura perjudican sin duda la autoestima de los homosexuales, cuando menos en el plano inconsciente. No es infrecuente que los gay tengan una baja opinión de sí mismos. Con el tiempo esto podría originar un desequilibrio en el centro energético cardíaco; las variaciones desfavorables del flujo energético en este centro energético paralizaron la función del timo, y de ahí resultó una indefensión frente al virus del SIDA.
  La manera en que el virus del SIDA colabora a la recurrencia de enfermedades es consecuencia de sus efectos sobre la función de los linfocitos. Concretamente el virus afecta a determinados linfocitos T, sobre todo a las células T-coadyuvantes. Uno de los criterios para el diagnóstico del SIDA en análisis de laboratorio es precisamente el índice de la subpoblación de T-coadyuvantes con referencia a las T-supresoras. Cuando disminuye el número de las primeras y asimismo escasean las T-destructoras, el organismo resulta más vulnerable a las infecciones víricas y bacterianas, así como a los tumores malignos como el sarcoma de Kaposi. Desde el punto de vista esotérico la disminución del número de linfocitos no la origina únicamente el virus de la inmunodeficiencia humana, sino también la disfunción del eje centro energético cardíaco/glándula timo, que habrá creado con anterioridad en el individuo la predisposición patógena. Aparte la presencia del virus del SIDA, hallaremos en las víctimas de esta enfermedad los bloqueos del centro energético cardíaco, del centro energético gonadal y de otros de estos centros del cuerpo sutil. Obvio es decir que las disfunciones energéticas sutiles que afecten al centro energético del corazón y las dolencias correlativas, que responden a desequilibrios en la expresión del amor, serán consideradas con creciente atención por parte de los terapeutas de Energía Vital.
   

 Chakra 3º Manipura/Nabhi o centro energético del Plexo Solar

El tercer centro energético es el que corresponde al plexo solar, y también promete ser un futuro centro
de atención dada la gran frecuencia de los bloqueos energéticos que le afectan. El centro energético del plexo solar se encarga de aportar energía sutil nutritiva a la mayoría de los órganos que intervienen en la digestión y la purificación, como son el estómago, el páncreas, el hígado, la vesícula biliar, el bazo, las glándulas suprarrenales, las vértebras lumbares y el sistema digestivo en general (aunque el intestino delgado y el colon corresponden al segundo centro energético).
  Desde el punto de vista emocional y espiritual, el centro energético del plexo solar se vincula con los aspectos del poder personal, noción ésta que podríamos interpretar como el dominio que uno ejerce sobre la propia existencia, aunque también tiene que ver con las maneras en que las personas se contemplan a sí mismas en relación con los demás. La cuestión es si uno se siente dueño de su propia vida y cómodo en sus relaciones, o si se vive sometido a los caprichos ajenos. Hay individuos aquejados de lo que suele llamarse “victimismo”, que tienen la sensación de no hallarse al mando de su propia vida, de ser ahora y siempre unos explotados. En ellos se manifiesta a menudo el desequilibrio del centro energético del plexo solar. La sensación de estar a gusto en el mundo como un lugar en donde vivir y prosperar, o su contraria la de estar viviendo en un valle de lágrimas donde todo lo que sucede va a peor, afecta directamente al flujo de la energía sutil a través de ese centro energético.
  En un mundo en rápido cambio, donde cada vez son mayores las exigencias a que han de responder la mente, el cuerpo y el espíritu, es fácil ver cómo el estrés puede manifestarse en forma de enfermedad debida a un bloqueo de la energía en el centro del plexo solar. El abuso de autoridad, la iracundia y el comportamiento ofensivo también se retrotraen a un funcionamiento anómalo de dicho centro. A menudo estas conductas abusivas expresan un sentimiento íntimo de impotencia que se vuelve contra los familiares más próximos, aunque no tengan ninguna culpa, contra los compañeros de trabajo o incluso contra los niños, por ejemplo los hijos de esos individuos que adolecen de una excesiva acumulación de energía en el plexo solar o centro “adrenal”. Es desde luego una cuestión de energías mal dirigidas.
  En el plano simbólico, el centro energético del plexo solar representa el elemento fuego. En efecto la región del plexo solar viene a ser como un sol en miniatura, donde arden las energías de la oxidación química a través de la digestión de los alimentos, que es como una especie de llama interior. Si esa llama interior está mal regulada, literalmente quemará la pared del órgano asociado a ese centro energético y hará un agujero en ella, como sucede en los casos de úlcera duodenal. El plexo solar es también la sede de la ira, la agresividad y otras emociones. Éstas van a menudo vinculadas con el sentimiento del poder personal y el dominio que uno cree tener o no sobre su propia vida. Si las cuestiones relacionadas con este centro energético no alcanzan una solución consciente, el sujeto queda con un conflicto interno que redundará en una excesiva preocupación por mandar y dominar sobre otras personas. De donde resulta una tensión permanente entre dominación y sumisión. Así pues, las personas preocupadas o “atascadas” por los problemas relacionados con el plexo solar tienden a un comportamiento tiránico por exceso de agresividad y autoafirmación o, por el contrario, se muestran cobardes, pasivas y sumisas. Es muy común que los individuos afectados por bloqueos a nivel del plexo solar oscilen entre ambos tipos de comportamiento, según cómo se presente la situación. Es interesante observar que algunos estudios sobre la personalidad de los pacientes ulcerosos demuestran que con frecuencia se trata de personas que han asumido una fuerte carga de responsabilidades de mando y autoridad, mientras que su temperamento interior es pasivo, falto de iniciativa y sumiso.
  Los desequilibrios del centro energético del plexo solar pueden afectar a cualquiera de los órganos digestivos que reciben las energías de dicho centro. Así la existencia de conflictos en el puesto de trabajo, debidos a crecientes exigencias de los superiores, y asociados con la sensación íntima de no poder hacer nada para cambiar de vida, a menudo se manifiesta como úlcera de la mucosa estomacal o duodenal. También las glándulas suprarrenales se consideran vinculadas con el centro energético del plexo solar (aunque algunas fuentes esotéricas dicen que también existe una relación energética de las suprarrenales con el centro energético raíz). Estas glándulas desempeñan un papel importante por lo que se refiere a la potenciación hormonal del organismo que ha de hacer frente a una causa de estrés. Cuando existe un bloqueo en el centro energético del plexo solar, se siguen dolencias que pueden originar la degeneración de las suprarrenales, con sensaciones de fatiga y debilidad. En este sentido el centro energético del plexo solar es un centro energético importante del organismo, que contribuye al aspecto externo de vitalidad de la persona.
  Otra enfermedad muy corriente y que deriva de los desequilibrios en el centro energético del plexo solar es la diabetes. Aunque este aspecto energético sutil de la diabetes no haya sido considerado por los facultativos, no deja de tener su importancia en la patofisiología del proceso de esta enfermedad. En el caso de la diabetes podría decirse que acompaña a la enfermedad un sentimiento de pérdida de poder, una sensación que podríamos describir metafóricamente como la de tener que renunciar a las dulzuras de la vida. Otros reflejos de los desequilibrios en el centro energético del plexo solar son la nostalgia del pasado, el dolor de lo que pudo haber sido y no fue. Otras veces el desequilibrio se manifiesta como afán de mandar que no encuentra su objeto. Con esto no queremos decir que todos los diabéticos sean unos tristes o unos nostálgicos; muchos de estos conflictos emocionales íntimos que afectan al funcionamiento de los centros energéticos permanecen por entero en el plano inconsciente. El individuo que los padece ni siquiera tiene conciencia de ellos ni sería capaz de manifestarlos verbalmente a las personas que le rodean.
  Muchas de las enfermedades que derivan de los desequilibrios de los centros energéticos son consecuencia de viejas grabaciones de memoria, podríamos decir, que en una fase temprana de la evolución individual quedaron registradas y programadas en la mente inconsciente del individuo. Estas grabaciones van repitiendo mensajes sugeridos por otros, o razonamientos elaborados por uno mismo, pero que en las circunstancias actuales ya no son adecuados, sino origen de errores inadvertidos. Pese a su contenido disfuncional, esos registros internos siguen utilizándose por parte de la mente inconsciente como material de referencia con el que se formula el concepto que uno tiene de sí mismo y el sentimiento de la propia valía. Para poder modificar los bloqueos o los desequilibrios de los centros energéticos sería preciso que nos diéramos cuenta de que hemos estado enviándonos mensajes erróneos, y cambiar esa programación interior. Para conseguirlo existen varios métodos, de entre los cuales uno de los más sencillos y eficaces es el de la afirmación verbal consciente. Cuando nos repetimos una y otra vez un mensaje de afirmación positiva, finalmente borramos aquellas cintas interiores destructivas que nos enviaban mensajes de inferioridad, miedo o remordimiento, y las reprogramamos con otros de seguridad, firmeza y autoestima.
  

 Chakra 2º Swadisthana (Del Bazo) o centro energético Ara  (Sacro)

 El segundo centro energético recibe indistintamente las denominaciones de Ara, centro energético umbilical, gonadal, esplénico o sacro. El centro energético sacro o gonadal es la sede de las energías sutiles de la sexualidad. En los autores esotéricos tradicionales hallamos algunas discrepancias en cuanto a la asociación del bazo con el segundo centro energético (en lugar del tercero o centro energético del plexo solar). Algunos clarividentes como Charles Leadbeater han descrito el segundo centro energético localizándolo en la región del bazo. De hecho es probable que sean dos centros principales los que existen entre el centro del plexo solar y el centro energético raíz. El centro energético esplénico se asocia con el bazo como órgano físico y la bibliografía esotérica lo da como la puerta por donde el prana y la energía vital se transfieren y distribuyen hacia el cuerpo sutil. Otros indicios apuntan la posibilidad de que existan dos sistemas de centros energéticos diferentes, uno para los orientales y otro para los occidentales, con diferentes asociaciones orgánicas. Cuando se refunden los dos aparece un nuevo sistema de centros energéticos. A los efectos del presente trabajo, sin embargo, admitiremos que el segundo centro es el centro energético sacro.
  Sus asociaciones son las gónadas y los órganos de la procreación, así como la vejiga urinaria, los intestinos grueso y delgado, el apéndice y las vértebras lumbares. Desde el punto de vista psicoenergético el centro energético sacro se asocia con la expresión de la emotividad sensual y de la sexualidad. El tipo y la medida adecuada de las energías que discurren a través de este centro reflejan la atención prestada a las emociones y a la actividad sexual en la vida del individuo. El planteamiento que cada uno tenga para su expresión sensual y su vida sexual podrá ofrecer aspectos positivos o negativos; algunas escuelas de meditación oriental (como la tantra yoga) utilizan la canalización de las energías sexuales como fuente de experiencias místicas. En el extremo opuesto, la exagerada atención a la sexualidad física con exclusión de todo interés superior espiritual u otra actividad creadora puede suponer efectos negativos, incluso en el plano fisiológico. Los individuos cuyas energías se centran primordialmente en ese centro energético suelen considerar las relaciones con otras personas exclusivamente desde el punto de vista de su utilidad sensual o sexual, y a las personas mismas como objetos sexuales.
  Las energías gonadales asociadas con el centro energético sacro guardan relación con la función hormonal de las células de Leydig presentes en los testículos y los ovarios. Estas células producen la testosterona, factor esencial de la libido y el deseo sexual en hombres y mujeres.
  Es bastante probable que las mujeres que padecen cáncer del cuello de la matriz o del útero estén afligidas por bloqueos u otros tipos de desequilibrio del centro gonadal o sacro (aunque no sólo en éste); otras enfermedades resultantes de la disfunción del centro energético sacro pueden ser las colitis e irritaciones intestinales, los tumores de la vejiga, las anomalías de la absorción en el intestino delgado, los diversos tipos de disfunción sexual, la prostatitis y los dolores lumbares. En muchas de estas enfermedades se han hallado asociaciones con diversos factores físicos que colaboran a la pauta definitiva de disfunción celular; el tabaquismo, por ejemplo, tiene relación con el cáncer de vejiga. En cualquier caso es el funcionamiento anómalo del centro energético sacro el que crea una predisposición energética sutil hacia la manifestación de esas dolencias, especialmente cuando concurre la exposición constante a los consabidos irritantes y carcinógenos. Hay que tener en cuenta el tema del bajón energético, pues en una relación sexual, si el varón solo da prioridad al aspecto físico, dejando de lado el espiritual, puede absorber la energía áurica de la mujer, afectando su campo psicogénico. Eso lleva a que la mujer somatice diversos síntomas que le puedan afectar su salud. Tengan en cuenta que el lugar donde probablemente harán más daño los trastornos psicogénicos estará determinado al menos en parte por el eslabón más débil de la cadena fisiológica/energética sutil. Y será el centro energético principal más desequilibrado el que influirá sobre cuál sea la región del organismo que represente dicho eslabón más débil.
  

  Chakra 1º Muladhara o centro energético Raíz  (Básico)

  Es el que se conoce como centro energético coccígeo, base o raíz, y como este nombre implica el centro raíz refleja el grado en que estamos conectados a la tierra o bien arraigados en nuestras actividades. La cantidad de energía que pasa por el centro energético raíz es una medida de nuestra capacidad para conectar con las fuerzas telúricas, y también de la de andar con los pies sobre la tierra durante nuestras actividades cotidianas, que es como suele describirse en términos populares la facultad de tomar decisiones día a día atendiendo al más genuino interés propio, a la necesidad inmediata. En el ámbito simbólico el centro energético raíz representa el elemento tierra y se refleja en los aspectos vibracionales más densos o frecuencias inferiores del ser.
  Psicológicamente hablando, el centro energético raíz está vinculado con el instinto básico de supervivencia. Guarda relación con los instintos más ancestrales de miedo a la lesión física y es el primer motor de la llamada reacción de lucha o huida. Esta relación con las reacciones de supervivencia y defensa propia o huida es el motivo de que en algunos escritos esotéricos se haya relacionado el centro energético raíz con las glándulas suprarrenales, principales responsables de la circulación de adrenalina en el organismo ante una situación de estrés. Cabe la posibilidad de que el centro energético del plexo solar esté asociado con la corteza exterior de dichas glándulas, la que segrega los corticosteroides, mientras que el centro energético raíz conecta con la región medular de las suprarrenales, donde se produce la adrenalina y otros derivados.
  Cuando se ha enfocado un exceso de energía hacia el centro energético raíz hallamos casos de paranoia generalizada o reacciones defensivas ante la mayoría de las situaciones. Esta plétora del centro raíz determina que el individuo afligido por ella se comporte con una mentalidad como de ley de la selva; pero también el déficit de actividad de este centro energético puede ser perjudicial, ya que dicho centro es responsable, en parte, de lo que se llama popularmente “ganas de vivir”.
  Se considera también que el centro energético raíz es la sede de la kundalini. Simbolizada como una serpiente enroscada en la región sacro-coxígea, la kundalini representa una poderosa energía sutil siempre alerta y esperando el momento de entrar en acción. Sólo cuando se han producido los oportunos cambios energéticos emprende esa fuerza su viaje ascensional por la vía espinal oportuna, para activar cada uno de los centros energéticos principales hasta llegar a la corona. La kundalini es la fuerza de las manifestaciones creadoras, y colabora al ajuste de los centros energéticos, a la expulsión del estrés acumulado en los centros corporales y a la elevación de la conciencia hacia los niveles espirituales superiores.
  Desde el punto de vista físico el centro energético raíz se asocia con el sacro, la espina vertebral en general y los orificios excretores externos como el recto, el ano y la uretra. Las dolencias que afectan al ano (hemorroides y fisuras rectales) y también las obstrucciones de la uretra pueden retrotraerse a disfunciones energéticas del centro energético raíz. Las estructuras físicas que se asocian con este centro simbolizan los procesos de eliminación. Como el intestino delgado y el colon se relacionan también con el centro energético sacro, existe un estrecho vínculo entre los dos primeros centros energéticos formando una zona energética pélvica. Así como algunas funciones fisiológicas del centro sacro representan los procesos de absorción, asimilación y retención, los órganos asociados al centro energético raíz corresponden a la expulsión de los materiales previamente digeridos. Estas dos funciones, asimilación y excreción, deben colaborar de manera armoniosa para mantener el organismo en estado de equilibrio. Debe producirse, en primer lugar, la absorción de los elementos necesarios y, secundariamente, la expulsión de los sobrantes innecesarios. Y si ésta no se desarrollase adecuadamente se originaría una acumulación de toxicidades en el organismo.
  Algunos textos esotéricos relacionan el centro energético raíz con 1as gónadas y también con las células de Leydig. Éstas son productoras de estrógenos y de testosterona, que se encuentran en los testículos y en los ovarios, así como en la corteza de las glándulas suprarrenales. Las gónadas dependen del primer centro energético o del segundo, posiblemente en función de si el individuo es oriundo de Oriente o de Occidente, o quizás de ambos, si tenemos en cuenta la doble función de las gónadas. En el plano del centro energético raíz vemos la función reproductora de las glándulas sexuales, donde tienen su origen los óvulos y los espermatozoides, los dos ingredientes que han de unirse para dar lugar a una nueva vida. A nivel del centro sacro, la función hormonal de las células de Leydig contenidas en las gónadas estriba en promover la libido y la atracción sexual, función que incumbe principalmente a la testosterona.
  Desde la perspectiva esotérica, las energías creadoras cósmicas que emanan del centro raíz pueden canalizarse, o bien hacia la procreación (dar a luz nueva vida) o bien hacia la creación artística, dando a luz nuevos pensamientos; ideas e invenciones. Esta creatividad se manifestará en escritos, pinturas, esculturas o traducción de nuevas ideas en realidades físicas. Así pues, las poderosas energías del centro energético raíz se aplicarán a engendrar hijos, o poemas, o música. Cualquiera de estas expresiones es una manifestación de creatividad de algún tipo. La energía creadora de la kundalini, que emana del centro energético raíz, viene a ser como el combustible que arde en esos hornos. Las energías deben sublimarse y canalizarse hacia otros centros superiores, por ejemplo el centro energético de la garganta en los casos de expresión refinada literaria o artística. Cuando se libera en condiciones controladas, la energía de la kundalini ajusta y sintoniza los centros energéticos superiores dando paso a la posibilidad de la expresión creadora y la espiritualidad superior.
 

 

Opinión de Gopi Krishna 

Gopi Krishna, el yogi oriundo de Cachemira que introdujo la teoría del Kundalini en el mundo occidental estimó que ha sido una verdadera tragedia que los científicos Occidentales no estudiaran otras religiones como la religión India o la tradición antigua de Egipto. El estima que al concentrar su atención solamente en determinadas religiones occidentales seguramente se produjeron anomalías en las teorías que se desarrollaron. Si se hubiera estudiado la literatura oculta del mundo como se estudio la alquimia, astrología y las ciencias antiguas de la medicina, se habría llegado a la conclusión de que hay una ley a la que todos los profetas se referían. Esta ley es una ley espiritual que se relaciona con la evolución de la mente humana, la emancipación del alma humana y que va subiendo hasta llegar a las dimensiones más altas de la existencia.
  Kundalini, en la tradición India, significa un depósito de potencia psíquica en el cuerpo humano que puede despertarse a la actividad por disciplinas, armonización energética por imposición de manos, toque terapéutico y ejercicios mentales o espirituales.
  En lo que concierne al Yoga; Kundalini es la base para la iluminación, el genio, la potencia milagrosa, y para todas las facultades extraordinarias y posibilidades latentes en la mente humana.
  La energía vital Kundalini es tan vieja como la cultura Egipcia. Lo que significa que se conocía más de 5,000 años antes del nacimiento de Cristo.
  Centenares y millares de libros mencionan la energía Kundalini  Se menciona en libros Chinos, en los jeroglíficos Egipcios y en el Tantra Indio. En la India hay millares de libros sobre Kundalini, que datan desde la prehistoria.
  Desgraciadamente la ciencia occidental aun no tiene conciencia de este Centro de Potencia, que de hecho es el mecanismo de la evolución de la humanidad. Los científicos creen que esa evolución ocurrió mediante mutaciones aleatorias. Esta teoría es disputada acaloradamente por unos u otros. Pero el hecho es que hay un mecanismo biológico en cada ser humano, y este mecanismo es conocido como la Energía Vital Kundalini. El despertar y armonioso fluir de esta energía puede estimularse mediante distintas disciplinas, ejercicios religiosos o con la ayuda de terapeutas especialmente dotados y preparados para la armonización y estimulación de los centros energéticos del ser humano.
En oriente a la energía vital Kundalini se la identifica como una serpiente. Esta referencia a la serpiente es muy antigua, incluso podría llegar a la edad Neolítica, porque el símbolo común universal que se adoró en todos lados es el de una serpiente y el sol.
  El cuerpo humano se alimenta de una esencia bioquímica muy fina: Prana. Gopi Krishna estima que Prana tiene dos aspectos, el universal y el individual. En el aspecto individual se compone de los elementos más sutiles. Krishna dice que este prana se concentra en la energía sexual. Dice que normalmente la energía sexual se utiliza con propósitos procreadores,  pero la naturaleza la diseñó también con propósitos evolutivos.
  La mayoría de la gente –dice Gopi Krishna- cree que el talento artístico y el genio en gran medida, depende de la sublimación de la energía sexual.
  Psicólogos como Freud y Jung describieron a la libido. Libido es energía sexual; en otras palabras energía vital.
  Quien cree en la Kundalini estima que el sistema reproductivo humano funciona de dos maneras: el evolutivo y el mecanismo reproductivo. El mecanismo evolutivo, envía un flujo fino de una potente energía hacia la vitalidad, la autoestima y las “ganas de vivir” y otro flujo hacia la región sexual produce el mecanismo de la reproducción.
  El ser humano necesita para su evolución espiritual de una vida normal, saludable y moderada, libre de ambiciones desmesuradas y de lujurias anormales; una vida que signifique paz consigo mismo y con el mundo que lo rodea; una vida de utilidad hacia los demás y, de ser posible, de servicio desinteresado hacia sus semejantes.
  En el curso de años –decía Gopi Krishna- cuando gran cantidad de gente adopte estas prácticas, y aprendan los diversos métodos de control de sus reacciones fisiológicas, habrá una cosecha de superhombres en la raza humana. Estos hombres serán extraordinarios desde todo punto de vista. Gopi Krishna estaba seguro que cuando las leyes sobre la Kundalini se conozcan y se practiquen con dedicación, el período de vida del ser humano aumentará hasta los 100 años o más.
  Gopi Krishna estimó, como muchos otros iniciados en estas técnicas, que dentro de los próximos años la teoría en lo que concierne a la Energía Vital Kundalini se establecerá y será aceptada por la ciencia. Las instituciones regulares de enseñanza serán abiertas para las prácticas y disciplinas dictadas por científicos y psicólogos competentes quienes estudiarán los cambios que ocurren sobre las personas en las que la energía vital Kundalini fluye armónicamente. Cuando esto sea un hecho, será una tarea fácil para la gente practicar estas disciplinas y ganar acceso a regiones más altas de conocimiento. El número puede ser pequeño en los primeros tiempos, pero crecerá en centenares y millares en el curso de las próximas décadas.
 

  

Conclusión 

Sabemos mucho sobre la salud y las enfermedades del cuerpo, y los curamos. Tomamos especial cuidado sobre nuestros cuerpos. Hay en muchas partes del mundo un culto del cuerpo. Concurrimos a gimnasios, hacemos deporte durante horas todos los días. Nuestro vigor físico en muchos casos es óptimo. Pero la mayor parte de nosotros le damos poco tiempo al desarrollo de nuestra mente.
 Existe una nítida desproporción entre la forma en que cuidamos nuestro cuerpo y el tiempo y el esfuerzo para adquirir conocimientos con el cultivo de la espiritualidad en todas sus manifestaciones.
  En la actualidad, la población del  mundo occidental desarrollado pone la mente alrededor de máquinas, conduciendo automóviles, viajando en aviones, manejando computadoras, todo tipo de instrumentos mecánicos, electrónicos etc. lo que no les permite disfrutar del descanso y de un ambiente calmo donde la espiritualidad pueda crecer en la dirección correcta.
  Además de las leyes materiales hay leyes espirituales o psíquicas en el universo. El mundo occidental no toma exacta conciencia de estas leyes. Los grandes profetas y los Mesías -quienes aparecieron en distintas partes del mundo a lo largo del tiempo- permitieron vislumbrar estas leyes y muchas veces las hemos rechazado por superstición o mito puro.
   Pero realmente esas enseñanzas contienen la verdad y son esenciales para la seguridad y la supervivencia de la raza humana.
  Si vamos al campo podemos ver a los que lo cultivan sonriendo en sus zonas y lugares de trabajo. En Buenos Aires o en las grandes ciudades del mundo difícilmente encontramos a la gente con aspecto feliz. En la gran ciudad se trabaja precipitadamente en un ir y venir constante con múltiples preocupaciones que nos acosan todos los días.
  ¿Podemos pensar que en estas condiciones podemos gozar de paz interior?
  Definitivamente; no.
  ¿Podemos obtener felicidad? Sí.
  Si cumplimos con el principio básico de la felicidad que es “Apreciar lo que se tiene e ir en busca de más”.
  

  

Chakras y Energía vital
 

Introducción
 

La vida es un proceso hacia arriba y hacia abajo, fluye desde su fuente hasta la manifestación y regresa a su fuente con un experiencia añadida obtenida en ese descenso. Esta manifestación que tiene dos polos genera un tercer aspecto y un concepto: La Trinidad.
La trinidad es un concepto fundamental en numerosas filosofías, sistemas metafísicos y religiones en todo el mundo, como la Trinidad cristiana y los gunas del hinduismo.
No importan los nombres que le damos a los participantes de las polaridades que generan una triada, pues el sujeto receptor es siempre uno mientras que el lado objetivo o de vida es muy diverso y genera una rueda, en cuyo centro está el YO receptor que al manifestarse y vivir, se mueve desde el punto central hacia una diversidad que es inevitable. Por lo tanto, la vida en su forma objetiva, implicará relación y separación y todo lo que les acompaña: como causa y efecto, el tiempo y la ley del ser, el nacimiento y la muerte o renacimiento.
Toda la experiencia por la cual crecemos y evolucionamos deriva de que estamos situados dentro de esta polaridad de Espíritu y Materia, Yin y Yan, Ser y no Ser, así como el modo en que actúa esta relación a través de nuestra conciencia.
Las religiones orientales tradicionales, hinduismo y budismo, ponen el énfasis en la alegría y bendición que se experimenta cuando el alma puede apartarse de su unión al ser personal y se une con el principio espiritual superior existente en nuestro interior. Esta unión con el Ser superior o real se llama "yoga" en la metafísica hindú y significa unión.
En la religión musulmana, este concepto se expresa como "Islam", que significa rendición del ser inferior al principio divino superior existente en uno mismo.
El cristianismo ha expresado esto, en la Comunión o Matrimonio Místico.
Otras filosofías occidentales, se ocupan más del aspecto de producir el principio espiritual y expresarlo en forma de actividad creativa.
En algunas escuelas de Metafísica, actualmente el ser trabaja con rayos.
Los rayos son expresiones de energía y al decir que somos expresiones de rayos significa que existimos, significa que existimos como manifestación de estas energías.
Por lo tanto, en la vida tenemos el descenso desde la propia fuente y el regreso a ella, e idealmente uno tendría que equilibrar ambos procesos, el mágico o camino del descenso y el místico o camino del regreso.

Nuestra experiencia es una vibración entre dos polos, uno de la Soledad cuando se da a nivel espiritual y el de la Conjunción cuando nos comunicamos personalmente con compañeros. La soledad deriva del estado de solo uno.
Arthur Koestler, en " The Yogi and the Commisar" lo expresa así:  Casi todas las personas tienden a permanecer en un nivel solo, ser capaz de moverse a voluntad entre los dos polos requiere habilidad y disciplina. Finalmente aprenden que los dos principios no son adversarios, sino que en realidad son los más cercanos aliados y son capaces de equilibrio, manteniendo la cabeza en las nubes y los pies en la tierra, extrayendo continuamente del espíritu y expresándolo a través de las formas..."
El hombre tiene la polaridad esencial en su eje a lo largo de la columna vertebral, el espíritu tiene su manifestación en la corona de la cabeza y la materia en la raíz o base de la columna.
En el medio de ambas polaridades hay etapas intermedias de conciencia; los chakras del hombre se corresponden con estas etapas intermedias que al igual que las notas musicales vibran desde la más grave o densa hasta la más aguda o sutil.
San Pablo definió al hombre como "Espíritu, Alma y Cuerpo", basando esta definición en los tres principios de la Trinidad, espíritu y cuerpo son las polaridades básicas y el pensamiento es la relación entre ambos.
El usaba la palabra "psyche" que incluyen el nivel mental y emocional que hoy llamamos mente en lugar de alma.

Entonces en la coronilla de la cabeza se manifiesta el espíritu, después en orden de intensidad el centro de las cejas es la sede del alma o la mente y el chakra de la garganta es el cuerpo en esencia, porque es la sede del éter.
Del éter nacen los cuatro elementos inferiores, una modificación del éter básico: son el aire, el fuego, el agua y la tierra. Estos elementos tienen su sede en los cuatro chakras inferiores.
Para algunos alquimistas el éter era la quinta esencia o quinto nivel de vibración, dado que los diferentes niveles de conciencia son, la fuerza de la vida vibrando en diferentes frecuencias y pasar de un nivel a otro es simplemente cambiar la tasa de vibración.
Einstein y otros físicos bien conocidos han observado que la materia es pensamiento que vibra en una frecuencia inferior.
La palabra chakra es sánscrita y significa rueda.
Los budistas la designan con el nombre de DHAMMACHAKKAPPAVATTANA SUTTA, que significa rueda de la vida o de la muerte o lo que se traduce poéticamente como "la puesta en marcha de las ruedas de la regia carroza del Reino de la Justicia".
El hombre es un alma que posee varios cuerpos, por que además del cuerpo físico visible tiene otros cuerpos que se relacionan con el mundo emocional y mental.
El doble etéreo es la parte invisible del físico, de suma importancia, porque es el vehículo por el cual fluyen las corrientes vitales que mantienen vivo el cuerpo y sirve de puente para transferir las ondulaciones del pensamiento y la emoción desde el cuerpo astral al cuerpo físico denso.
Los chakras son puntos de conexión o enlace por los cuales fluye la energía de uno a otro vehículo del hombre.
Son como vórtices (remolinos) esféricos en el cuerpo etérico que acúan como transmisores de energía. Tienen influencia en nuestra actividad en el plano físico a través del funcionamiento de las glándulas endocrinas (glándulas de secreción interna como la tiroides). Estas glándulas afectan a nuestro funcionamiento corporal, al balance mental y a la integridad emocional. Dependiendo del uso que les demos a ellos y a nuestras energías serán constructivos o discordantes.
 

Nuestro cuerpo etérico tiene 7 chakras básicos. No existen chakras buenos o malos, todos son necesarios para las experiencias terrestres como para el mismo proceso de espiritualización.
Voy a explicar la función de cada chakra por separado, pero no hay que olvidarse que funcionan como un todo. En ese todo está el equilibrio.
Cada chakra tiene una función dual, con excepción del primero y el séptimo. Los demás tienen una actividad mundana y otra espiritual.
  

Chakras Menores
 

También encontramos dentro del cuerpo físico y alrededor de el, dentro de los vehículos mental, emocional y espiritual, cientos de puntos de energía, llamados chakras menores de los que los más importantes se encuentran en las manos y los pies.
Los chakras se dividen en tres grupos: superior, medio e inferior o respectivamente: espiritual, personal y fisiológico.
Los chakras primero y segundo tienen la función de transferir al cuerpo dos fuerzas procedentes del plano físico. Una es el fuego serpentino de la tierra y la otra la vitalidad del sol.
Los centros tercero, cuarto y quinto, están relacionados con las fuerzas que por medio de la personalidad recibe el ego. El tercero las transfiere a la parte inferior del cuerpo astral, el cuarto a la parte superior de este mismo cuerpo y el quinto por el cuerpo mental.
Todos alimentan ganglios nerviosos del cuerpo denso. Los centros sexto y séptimo están relacionados con el cuerpo pituitario y la glándula pineal y se ponen en acción cuando se alcanza cierto grado de espiritualidad.
Ahora vamos a abocarnos a la descripción de cada uno de estos siete chakras principales, sus características, como estan relacionados unos con otros y su relación particular con los cuerpos inferiores.
  

Chakra Básico ó Primer Chakra
 
TAMBIEN LLAMADO CHAKRA FUNDAMENTAL O MOOLADHAR:

Está ubicado en la base de la columna vertebral en el área del coxis, determina nuestra conexión con la tierra y la materia.
En sánscrito Mula significa raíz, y Adhara soporte.

Se abre hacia abajo en dirección de la Tierra y conecta a la persona con su entorno físico, sus cualidades son la solidez y la resistencia. Suele llamárselo el ancla del espíritu, está relacionado con la sustancia que recorre la columna vertebral, energetiza y fortalece el cuerpo físico visible: músculos, huesos, sangre, glándulas suprarrenales y órganos sexuales.
Es el centro de la sobrevivencia o instinto de conservación, su mal uso determina el abatimiento físico y moral. Es también el lugar donde más intensa energía hay en el cuerpo humano, aquella energía que nos permite generar vida, cuando está muy activado la persona siente deseos de saciarse a nivel sexual y así la energía retrocede.
Es particularmente importante porque es el asiento del kundalini y punto de arranque de los tres meridianos principales.
Por ser un extremo debe equilibrarse y abrirse con el séptimo y opuesto a él.

El funcionamiento de este chakra determinará nuestra conexión con la tierra y la materia. Se encuentra a la altura de los genitales.
Suele llamárselo como el ancla del espíritu. Está relacionado con una sustancia (ubicada a lo largo de la columna vertebral) que mantiene al cuerpo en forma y cuando no funciona bien se presentan las enfermedades y el cuerpo empieza un proceso de deterioro.
Este chakra está asociado con el sexo. Es también el lugar donde más intensa energía hay en el cuerpo humano, aquella energía que nos permite generar vida.
Como todos los chakras se encenderá con el estímulo de la corriente espiritual. Cuando está muy activado la persona tendrá deseos de saciar su deseo a ese nivel. Cuando lo logra, el nivel de energía retrocede.
Posee 4 pétalos. Características positivas: Fortaleza, vigoriza el ánimo, anima el entusiasmo, estimula el sistema nervioso y otorga la resistencia, el esfuerzo y la constancia.
El mal uso determina el abatimiento físico y moral.
 

CUALIDADES: inocencia, sabiduría, eterna niñez, castidad.
ORGANOS: útero, glándula prostática, sexo, expresión, sistema nervioso parasimpático.
CORRESPONDENCIA: N 4, rojo anaranjado, martes, tierra, coral, Marte.
RAYO: blanco, cuatro pétalos.
VIRTUDES: serenidad, confianza, autocontrol, altruismo, exactitud, equilibrio mental y moral.
MANTRA: AING-KUAN
 

 

Chakra Esplénico ó Segundo Chakra
 

TAMBIEN LLAMADO CHAKRA  SWADHISTHANA:

Se encuentra a la altura del ombligo y visualizado desde la parte posterior está en el sacro. Actúa en el bazo y su función es especializar, subdividir y difundir la vitalidad dimanante del sol, da una perfecta armonía en el cuerpo, la mente y las emociones.
Swa significa "lo que es y le pertenece al yo" y Dhisthana "su lugar real".

Está íntimamente relacionado con el del plexo solar. Controla y energetiza el intestino delgado, la parte inferior del intestino grueso y el apéndice, también tiene influencia sobre el sistema nervioso y la temperatura del organismo.
Regula el erotismo y es el asiento de la creatividad a través del asombro infantil y el entusiasmo manifiesto por el universo.
Es donde el hombre manifiesta una intrínseca masculinidad y la mujer su intrínseca femineidad. Gobierna el principio del gusto y está asociado al elemento agua.
 

Posee 6 pétalos.
Características positivas: Tiene influencia sobre el sistema nervioso y en la temperatura del organismo. Da una perfecta armonía en el cuerpo, la mente y las emociones. Su mal uso produce histerismo ó se buscan experiencias que reflejen intensidades de placer o de dolor.
 

CUALIDADES: creatividad, inspiración estética, conocimiento.
ORGANOS: riñones, bilis, páncreas, hígado, útero, piernas, bazo.
CORRESPONDENCIA: N 6, amarillo, miércoles, fuego, topacio, Mercurio.
RAYO: violeta, seis pétalos.
VIRTUDES: comprensión de la unidad, amplitud mental, tolerancia, humildad, benevolencia y amor.
MANTRA: SHING-TIUNG



 
Plexo Solar ó Tercer Chakra:
 

TAMBIEN LLAMADO CHAKRA MANIPURA:

 Se encuentra por encima del ombligo o en el plexo solar, tiene influencia en el aparato digestivo, dominio sobre el subconsciente y además iluminando la mente. Da cordura, enciende iniciativas, desarrolla en alto grado la prudencia
y su mal uso produce la necesidad de consumir azúcar, celos y la imposibilidad de decir que no.

Es el centro de las emociones y sentimientos de diversa índole y está relacionados con órganos vitales.
En sánscrito significa "ciudad de joyas", es el asiento de la personalidad y juega un papel importante en la relación de la persona con el mundo, la gente, las cosas. La capacidad de conectar, pertenecer, establecer asociaciones íntimas y duraderas como la familia y el hogar están asociadas con su energía.
La diferencia de este chakra con otros es la consistencia y uniformidad de la energía irradiada.
Si bien el amor es una energía que nace del corazón es la conexión que se establece con el chakra del plexo solar lo que mantiene unida una pareja, el temor a no ser querido y el miedo a la separación está almacenado aquí.
 

Se encuentra en la boca del estómago. Posee 10 pétalos.
Tiene influencia sobre el aparato digestivo cuando están los 10 pétalos activados. Además da dominio sobre el subconsciente e ilumina la mente. Da cordura, enciende iniciativas y talentos, y desarrolla en alto grado la prudencia. Su mal uso o desequilibrio da necesidad a consumir azúcar, celos, imposibilidad a decir 'no'
 

CUALIDADES: bienestar físico, emocional y mental, paz, satisfacción.
ORGANOS: hígado, estómago, intestinos.
CORRESPONDENCIA: N 10, verde, jueves, agua, esmeralda, Júpiter
RAYO: oro rubí, diez pétalos.
VIRTUDES: fortaleza, autosacrificio, pureza, veracidad, tolerancia, serenidad, equilibrio y sentido común.
MANTRA: AUM-MAN

  

Chakra Cardíaco ó Cuarto Chakra
 

TAMBIEN LLAMADO CHAKRA ANAHATA:

 Se encuentra ubicado en la octava vértebra, a la altura del corazón, es responsable de toda compasión y amor sin egoísmo, de la trascendencia y el discernimiento.
Su nombre en sánscrito significa "imbatido".

Cuando está activado estimula la vitalidad y la actividad en el cerebro, tonifica el sistema glandular y activa la secreción interna.
Es el centro de las emociones superiores o depuradas, otorga la sabiduría divina, la estabilidad, la paciencia y el equilibrio mental ante el sufrimiento o el placer. Está relacionado con el del plexo solar por que ambos son emocionales y cuando se agita uno afecta al otro, por eso las emociones negativas tienen efecto pernicioso sobre el corazón.
Pasar del plexo solar al cardíaco es cambiar el sentido del "yo" y reconocer que va más allá de la definición.
En su aspecto trascendental es la fuente de luz-amor, no solo humana sino Divina, que en el Nuevo Testamento se describe como "ríos de agua de vida".
La glándula del timo está ubicada sobre el chakra del corazón y es la responsable del sistema inmunológico del cuerpo físico, por eso si la energía de este chakra está bloqueada la función de esta glándula también lo estará y el sistema inmunológico será suprimido.
Es la puerta al cuerpo astral y regula la calidad y las interacciones de alegría, dolor, temor e ira.
De estar bloqueado el chakra no permitiría el fluir normal de las emociones y la persona se alteraría, tendría dificultad de permanecer equilibrada por que la energía no podría fluir del cuerpo físico a los cuerpos sutiles.
Se lo llama la puerta del alma, donde mora Dios, donde todo su amor se deposita, aunque no lo amemos a él, El nos ama y tiene acceso a la persona en su multiplicidad.
 

Se encuentra a la altura del corazón. Este chakra es responsable de toda compasión y amor sin egoísmo, de la trascendencia y el discernimiento. Posee 12 pétalos. Tiene relación directa con el rayo rosa. Cuando están todos los rayos activos estimula la vitalidad y actividad en el cerebro, tonifica el sistema glandular y activa la secreción interna.
Otorga la sabiduría Divina, la estabilidad, la perseverancia, la paciencia y el equilibrio mental ante el sufrimiento o el placer. Se empieza a ser más objetivo.
Su desequilibrio da sensación de vacío, el ser se vuelve prejuicioso.
 

CUALIDADES: existencia del ser, amor, alegría, gozo espiritual, confianza, seguridad, respeto, sinceridad, desapego.
ORGANOS: corazón, pulmones.
CORRESPONDENCIA: N 12, rojo rubí, viernes, aire, rubí, Venus.
RAYO: rosa, doce pétalos.
VIRTUDES: simpatía, tolerancia, devoción, exactitud, energía y sentido común.
MANTRA: TIUNG-SUNG
  

Chakra Laríngeo ó Quinto Chakra
 

TAMBIEN LLAMDO CHAKRA VISHUDDHA:

El significado de su nombre es "puro", está asociado al elemento éter y al sonido.
Está centrado en el cuello, alrededor de la garganta. Tiene influencia en la comunicación y en la expresión, el oído y la telepatía.
 

Controla y energetiza la garganta, las glándulas tiroides y paratiroides, el sistema linfático, el aparato vocal y bronquial,
el canal alimenticio y el oído interno.
Es el centro responsable del rejuvenecimiento y la longevidad, de la mente inferior o concreta y de lo creativo superior.
Los yoguis piensan que con este chakra activado, la persona es capaz de separar las funciones del cuerpo mental de las
funciones de los cuerpos inferiores. se alcanza la claridad junto a la comprensión y una nítida percepción del Dharma.
Se toma conciencia por primera vez de que los mundos internos son reales y que existimos en el mundo sutil y físico simultáneamente.
Es gracias a este chakra que la persona puede transformar otras formas de energía humana en gozo incondicional y que sea posible.
Es una línea divisoria de aguas, todas las frecuencias de los chakras inferiores pueden ser elaboradas y transformadas en gozo incondicional.
Una vez que el Prana puede fluir a través de el se puede permanecer firme frente a la oposición y decir que no, de modo que es sinónimo de integridad personal. Se trasciende el miedo, el YO SOY emerge y puede expresarse en cualquier situación.

 
Está centrado alrededor de la garganta. Influye en la expresión y la comunicación, el oído y la telepatía. Tiene 16 pétalos. Gobierna la tiroides, los aparatos bronquial y vocal, los pulmones, el canal alimenticio y el oído interno (la clarividencia). Este centro es responsable del rejuvenecimiento y la longevidad.
A niveles puramente físicos, las dolencias de este centro incluyen el vértigo, la anemia, alergias, fatiga y asma. Existe confusión y el ser se desintoniza.
 

CUALIDADES: relación fraternal con los demás, diplomacia, conciencia colectiva, ser testigo de lo que sucede alrededor sin involucrarse.
ORGANOS: cuello, hombros, brazos, boca, cara, lengua, orejas y oído.
CORRESPONDENCIA:N 16, azul, sábado, éter, zafiro, Saturno.
RAYO: azul, dieciséis pétalos.
VIRTUDES: Ternura, humildad, tolerancia, simpatía y paciencia.
MANTRA: SIEM-BUAM
 

  

Tercer Ojo ó Sexto Chakra
 

TAMBIEN LLAMADO CHAKRA AJNA:

 Este chakra está ubicado en la frente, entre los ojos, su nombre significa "mando".
A veces se lo llama el ojo de Shiva o el ojo de la sabiduría.
Está relacionado con la sílaba ohm, que representa el comienzo y el final de todas las cosas.

Es desde este centro que la persona armoniza las fuerzas de sí y logra el equilibrio entre el Yin y el Yan.
Pertenece al mundo del espíritu, en donde residen los superiores y permanentes principios del hombre.
Cuando se activan todos sus rayos el individuo desarrolla la templanza, despierta ideas de dignidad, grandeza, veneración y sentimientos delicados, esto produce además la clarividencia positiva.
Su despertar otorga la evolución espiritual y el dominio sobre la materia.
En el cuerpo físico controla y energetiza la glándula pituitaria y el sistema nervioso en general.
Su desequilibrio produce insania, pérdida de la memoria, olvido y miedo al futuro. Tiene dos divisiones compuestas cada una de 48 rayos, lo que da un total de 96.
Es el asiento de la Divina Inteligencia, controla el pensamiento intuitivo, el pensamiento racional y la memoria. Se pueden crear nuevas realidades con solo pensarlas e impulsarlas hacia el objetivo de la plenitud y el mejoramiento del dharma, transformando así la realidad física.
La conciencia y la inconsciencia se fusionan y la persona se ve como la unión de dos Yo, el YO SOY.

 
Se encuentra en el entrecejo. Tiene 2 divisiones compuestas, cada una en 48 pétalos, o sea, un total de 96. Este centro pertenece al mundo del espíritu en donde residen los superiores y permanentes principios del hombre. En el cuerpo físico, el tercer ojo gobierna la glándula pituitaria, el cerebro izquierdo, el ojo izquierdo, las orejas, nariz y el sistema nervioso en general. Cuando se activan todos los rayos, el individuo desarrolla la templanza, despierta ideas de dignidad, grandeza, veneración y sentimientos delicados, produce la clarividencia positiva.
Su despertar otorga la evolución espiritual y el dominio del espíritu sobre la materia.
Su desequilibrio hace que el ser sea ilógico, demasiado intelectual, distraído, olvido, miedo al futuro.
 
 
CUALIDADES: perdón, resurrección, conciencia en silencio, conciencia sin pensamientos y paz mental.
ORGANOS: cabeza, ojos, los hemisferios cerebrales.
CORRESPONDENCIA: N 2, blanco, domingo, luz, diamante, Sol, cruz.
RAYO: verde, treinta y dos pétalos.
VIRTUDES: reverencia, devoción, conmiseración, amor y amplitud mental.
MANTRA: KIUM-TUANG
  

Chakra Coronario ó Séptimo Chakra
 

TAMBIEN LLAMADO CHAKRA SAHASRARA:

 Es el loto de los mil rayos, en el que se manifiesta ampliamente la Divinidad, el hombre se hace uno con su Intimo.
Esta ubicado en la parte superior de la cabeza y no entra en funcionamiento a menos que el individuo haya hecho un trabajo espiritual consciente.

Vibra con altísima rapidez y cubre la parte superior de la cabeza pudiéndose ver en algunos casos un aura dorada.
Al principio es una depresión del doble etérico por la que penetra la divina energía, pero cuando el hombre se reconoce rey de la divina luz, ya no es un canal receptor sino un radiante foco de energía y en su cabeza tiene una cúpula erecta, como una corona.
La persona ha logrado la plenitud, ha trascendido el miedo, se ha identificado como el Yo Soy y experimentado el gozo incondicional, lo único que le falta es la unión del campo de energía individual con la energía del campo universal.
Es aquí cuando se abre el loto de los mil pétalos.
Este chakra es el centro de la conciencia cósmica o superior, esto pone al individuo frente a la creación sin límites y como uno con su potencialidad, se puede convencer que tiene el poder de la transmutación, de la comprensión inmediata o la percepción directa de la unidad con todo, de la unidad con Dios. A través de la conciencia cósmica uno siente una bondad amorosa hacia todo.
En el Tantra, el despertar corresponde a la unión de lo femenino (Shakti) con lo masculino (Shiva), que es una unión para siempre.
Al sentirse parte del universo la persona deja de comprender su universo para no dejar de ser.
No hay retorno de este estado, no hay muerte, solo hay vacío y en el vacío uno se encuentra en el Todo.
 

Se encuentra en la cabeza en la parte superior. Es el loto de mil pétalos, en el que se manifiesta ampliamente la Divinidad. El hombre se hace uno con su Intimo. No entra en funcionamiento a menos que el individuo haya hecho un trabajo espiritual consciente. Es un chakra que vibra con altísima rapidez, hasta cubrir la parte superior de la cabeza pudiéndose ver en algunos casos un aura dorada. Cuando se activan todos los rayos, el individuo por primera vez entiende que la creación no tiene límites y que es uno con su potencialidad. En este punto se convence que posee el poder de la transmutación. La maestría a este nivel implicará la eventual trascendencia del propio Cuerpo Causal.

 
CUALIDADES: evolución espiritual, conciencia colectiva, integración, silencio, alegría y gozo espiritual sin límites.
ORGANOS: cerebro, control general de todos los órganos, fontanela.
CORRESPONDENCIA:N 1 y 1000, integración de todos los colores, lunes, vibraciones, perla, Plutón, bandham.
RAYO: amarillo, mil pétalos.
VIRTUDES: Amor, compación, altruísmo y energía.
MANTRA: UAM-MING
 
 

Pares

El esplénico y el laringeo trabajan juntos y pertenecen a la creatividad. El Plexo Solar y el Tercer ojo están relacionados con la visión y la inteligencia. El cardíco y el Coronario expresarán dimensiones cósmicas. Cada chakra expresará la misma función en una frecuencia más baja.
Las enfermedades, están relacionadas también a la incapacidad de absorber, transmutar o integrar frecuencias energéticas. Cuando una energía entra en un chakra y se ve bloqueada, buscará expresarse mediante una disociación sicológica. En cambio cuando una energía ya está dentro de un chakra pero se expresa de manera negativa se manifiesta eventualmente a través de problemas físicos.
  

Chakras Interdimensionales

Existen cinco centros de energía fuera del cuerpo que están localizados en otras dimensiones del ser. Aunque existen en el presente son invisibles e inaccesibles a nuestros sentidos.
Estos chakras aparecen en pares. El primero estaría localizado a más o menos 30 cm. sobre la cabeza y 30 cm bajo los pies; el segundo alrededor de 90 cm en ambas direcciones y el tercer par a un metro. El cuarto y quinto par sobrepasaría nuestros conceptos tridimensionales y se extenderían hacia el infinito arriba y abajo. Cuando aumentamos nuestra vibración podemos percibirlos, sentirlos y ser partícipes de ellos.
Hay también un octavo, noveno, décimo, onceavo y doceavo chakra que operan con o sin nuestra participación consciente. Todos están ubicados por encima y por debajo del cuerpo.

Existen varias técnicas para el nivelamiento de nuestros centros, entre ellas la cromoterapia, ejercicios físicos, técnicas de visualización, etc. En realidad todas estas técnicas colaboran para que nuestros centros funcionen correctamente.
 
 

Los chakras "externos"

Nacemos con un circuito bioeléctrico que es el encargado de distribuir nuestra energía. Los vórtices (chakras) forman parte de un sistema. Desde estos vórtices, la energía fluye al cuerpo para limpiarlo y recomponerlo. La energía cósmica llega a nosotros, entrando por el vórtice corona y desde allí los circuitos van al cuerpo, actuando a través del sistema integrado de vórtices. Estamos diseñados en tal forma que se supone que no deberíamos estar lamentándonos por nuestros dramas por mucho tiempo. Las personas que mantienen vivos sus recuerdos dolorosos, están colocando energía en ellos para alimentarlos al costo de la vida de sus propias células.
Los vórtices ubicados por debajo de la cintura se relacionan con nuestra vida externa y con nuestro poder externo. Es muy grande el número de enfermedades que se originan por debajo de la cintura y luego se pueden trasladar a otros sectores.
El primer y segundo vórtices son los únicos chakras ubicados por debajo de la cintura, representan nuestra "comunicación"
con lo externo.
 

El primer vórtice (Chakra Básico)

Es el asentamiento de la Base de Datos Tribal. Al nacer, somos programados por la tribu.
Los circuitos que entran por el vórtice corona son enchufados a distintos patrones de creencias que la tribu ha decidido.
Nuestro primer vórtice pide que tengamos tribu que nos alimente, necesitamos la energía del grupo que nos nutra en todo sentido. Esperamos que la sociedad se haga cargo (gobierno, empresa, etc.). Esto se ha ido perdiendo en los tiempos que vivimos. El "arquetipo tribal" está cambiando y esto tiene influencia sobre nuestro cuerpo físico. Al estar enchufados en el antiguo arquetipo seguimos esperando que nos sostengan, aún sin darnos cuenta.
Debido a esto, se ha ido desarrollando la conciencia de VICTIMA. Esto se traduce en auto-lástima, en quejas, le echamos la culpa a los otros. Cuando una persona adulta emana conciencia de víctima, atrae los virus.
 

El Segundo Vórtice(Chakra Esplénico)

El segundo vórtice tiene varios aspectos a considerar:
La creatividad corresponde a la energía de este vórtice, se trata de querer dar a luz las ideas y llevarlas a cabo. Cuando no podemos realizarlas, producimos "abortos" de la creación.
La inspiración llega a nosotros desde el plano intuitivo, atravesando la corona, la garganta y el cardíaco. Luego llegará al tercer vórtice donde puede surgir la pregunta, que nos demanda esta propuesta desde lo individual (los vórtices nombrados están situados por encima de la cintura).
Cuando la inspiración llega al segundo vórtice, aparecen las preguntas: cuánto costará y quién estará "a cargo" (comenzamos a sospechar de las personas y a generar temores).
Si nuestras ideas son abortadas, pueden aparecer trastornos en el sistema genito-urinario, estos "abortos" dejarán un "tejido cicatricial" similar a otro tipo de abortos que conocemos.
Muchas enfermedades del cuerpo físico se originan en primer término en los órganos alojados por debajo de la cintura. Una de las posibles causas de esto apuntaría hacia la "imposibilidad de sentirnos creativos" (la depresión puede ser un anuncio previo).
El segundo vórtice nos conecta con todas las situaciones y personas que queremos CONTROLAR. ¿Cuánto invertimos en lo que controlamos?
CONECTAMOS LA ENERGIA CORRESPONDIENTE A LA SEXUALIDAD CON EL PODER Y EL DINERO.

Cuando usamos el dinero para CONTROLAR a otros, aunque creamos amarlos, estamos bajando la energía del cuarto vórtice para conectarla al segundo. Los ASUNTOS FINANCIEROS corresponden tambien a este vórtice. Los trastornos y enfermedades que aparecen en la parte baja de la espalda (hernias de disco, ciatalgias y otras) suelen estar relacionadas con el "stress financiero".

EL SEGUNDO VORTICE ES UNA VERSION MAS REFINADA, MAS PERSONAL DE LAS ENSEÑANZAS DE LA TRIBU.

Las supersticiones sobre asuntos financieros se graban en el primero y en el segundo es el encargado de atraer las realidades (debido a que es el centro de las RELACIONES) para que se cumplan los mandatos de la tribu. Llegarán justo las personas adecuadas que nos demostrarán que la tribu tiene razón (nuestra emisión de energía atrae exactamente lo que necesita).
Invertimos nuestro espíritu en una percepción que aceptamos como la VERDAD REVELADA (eterna) sin intentar diferenciar lo cierto de lo verdadero (explicaremos la diferencia).
Cuando nos sentimos defraudados por la tribu (violados y traicionados por haber creído) aparecen enfermedades del área sexual, tales como prostatitis, problemas ováricos y uterinos.
EN EL PRIMER Y SEGUNDO VÓRTICES RIGE EL CODIGO DE HAMMURABI (ojo por ojo,...).
Solo cuando evolucionamos podemos perdonar.
Nuestra tribu nos dio lo mejor que tenía, es nuestra tarea elevarnos por encima de esa energía. La tribu es necesaria para mantenernos a salvo pero no permitirá nuestro desarrollo como individuos. Es peligroso para la tribu nuestro deseo de evolucionar pues conduce a disminuir la energía tribal.

CUANDO DESCONECTAMOS NUESTROS CIRCUITOS DE LAS CREENCIAS DE LA TRIBU, DESARROLLAMOS MAS AUTO-CONFIANZA.

Desconectamos los circuitos de la necesidad de leyes humanas y vivimos en el Poder de la espontaneidad del Orden Universal. Detrás de cada suceso, hay un mensaje del Universo.
La COMPETENCIA también se relaciona con el segundo vórtice: todas las personas respecto de las cuales sentimos que competimos o que compiten con nosotros. Estamos transmitiendo energía de nuestro cuerpo a la otra persona. Somos electrocutados por el intercambio. Es posible que sintamos una oleada de calor cada vez que pensamos en ellos (esto se debe a que en ese momento estamos tocando los circuitos eléctricos del otro, tocamos un circuito que conecta un cable con nuestra propia vida).
También se alojan en este vórtice, nuestros INTERESES SEXUALES, cuando nos sentimos interesados o extrañando la presencia de una persona.
 

 

 LOS CHAKRAS Y LAS ENERGIAS
 

Por los chakras fluyen tres principales energías representativas de los tres aspectos del Logos.
La energía que penetra por la boca del chakra y que en relación a sí misma establece una energía secundaria o segundo aspecto del Logos y vitalizada por el tercer aspecto del Logos. Que es el Cristo encarnado.
La segunda se subdivide en un número infinito de grados y se diferenció de sí misma por el maya o ilusión con la que la vemos actuar. Se difunde por infinitos canales y se manifiesta en todos los planos y subplanos de nuestro sistema.
En su ínfima manifestación es un velo de materia etérea y desde el cuerpo astral se transfiere por los chakras al cuerpo físico en donde se encuentra con otra energía.
La tercera energía es la manifestación en el plano físico de la primera oleada de vida del tercer aspecto del Logos. La energía del Kundalini o fuego serpentino de nuestro cuerpo procede del laboratorio del Espíritu Santo en las entrañas de la tierra y es parte del globo ígneo.
Así es como absorvemos la potente energía de Dios por debajo, desde la tierra y por arriba, desde el cielo. Somos por lo tanto, hijos de la tierra y del sol respectivamente; una energía baja y la otra sube y confluyen en nosotros ayudando a nuestra evolución.
El Kundalini, según la escuela trashimaláyica se llama SUSHUMNA, es el principal de los NADIS; que corre a lo largo del conducto medular de la columna vertebral y está acompañado por el IDA y el PINGALA, que cuando se pulsan despiertan el mana espiritual y el físico karma y dominan la naturaleza inferior con la superior.
IDA y PINGALA funcionan a lo largo del cordón de SUSHUMNA, son semi-materiales, uno es positivo y otro es negativo; sol y luna y poseen en acción la libre y espiritual corriente de SUSHUMNA.
El IDA se representa como una línea carmesí, el PINGALA con una línea amarilla y el SUSHUMNA con una línea azul intenso luego de una iniciación.
Aunque la campana de la boca del chakra está en la superficie del cuerpo etérico, el tallo nace en un ganglio o centro de la columna vertebral.
La campana contiene la energía divina que fluye y el tallo etéreo conecta la raíz del centro espinal con el chakra externo.
El fuego serpentino fluye por los tallos y llega a la campana del chakra donde recibe la afluencia de la energía divina y la presión resultante del encuentro determina una radiación horizontal de ambas energías mezcladas.
Ambas energías en su encuentro giran en direcciones opuestas, este fenómeno se llama "maridaje". La energía primaria, masculina, con la energía del kundalini, que es femenina da por resultante el magnetismo personal del hombre, que vivifica los ganglios o plexos, fluye por los nervios y mantiene la temperatura del cuerpo.
Aquí agregamos un diagrama del encuentro de las energías en la campana del chakra y como se representa el maridaje. Al combinarse en su encuentro ambas energías, algunas de sus moléculas se entrelazan y la energía primaria es capaz de ocupar diferentes formas etéreas, formando generalmente un octaedro; que son cuatro átomos dispuestos en forma de cuadrado, con un átomo central en constante vibración hacia arriba y hacia abajo, en el centro formando un ángulo recto. El fuego serpentino está representado por un disco plano de siete átomos que se mueven en forma circular a gran velocidad, con energía latente que se manifestará ante alguna combinación.
Por último, vamos a mencionar al glóbulo de vitalidad que se forma cuando la energía vital se infunde en un átomo y la dota de suplementaria vida y fuerza de atracción.
Es el pequeño grupo que constituye el brillante gránulo en la serpiente masculina del elemento químico oxígeno, como así también es el corazón del globo central del radio. Se distingue por su brillantez y extremada actividad cuando flotan en la atmósfera.
La energía que vitaliza estos glóbulos es distinta de la luz, pero depende enteramente de ella en su manifestación. Una vez cargado actúa como un elemento subatómico y no trasmuta o disminuye energéticamente hasta que no lo absorbe un ser viviente.
El aire enriquecido con estos glóbulos de vitalidad es lo que las corrientes de Yoga llaman con el nombre de Prana. Prana significa energía absoluta, es la fuente original de todas las formas de energía encontradas en nuestro universo tridimencional. El Prana en combinación con la conciencia, se convierte en vida. Cuando esta fuerza de vida se conbina con la materia tenemos las formas de vida que habitan el universo físico manifiesto.
El Prana se puede almacenar y canalizar en nuestro sistema, sin superar la capacidad de los chakras y de los nadis de conducirlo y de las auras de almacenarlo. El nivel de conciencia de cualquier forma de vida depende de la frecuencia de Prana que puede almacenar y canalizar por su sistema de energía sutil.
Esta absorción se realiza a través de la respiración y particularmente en días soleados. Cuando está nublado o por las noches el hombre vive de las reservas acumuladas por los nadis en el interior de su cuerpo físico.
De aquí que sea tan importante en la recuperación de muchas enfermedades, la alegría y el bienestar que produce el beso del sol, penetrando en todos los cuerpos.
Si bien se puede pensar que en verano y en días soleados esto glóbulos están más disponibles que en días de lluvia o en invierno, debemos tener en cuenta el aporte de los seres elementales del aire que se encargan de distribuír estos glóbulos desde lugares en donde abundan hacia aquellos en donde escasean. 

Además de las tres energías mencionadas con anterioridad, que regulan el bienestar del hombre, existe otra energía que penetra a través de dos chakras (cardíaco y plexo solar) que puede calificarse de psíquica y espiritual.
Esta energía que penetra por los chakras afecta a la conciencia humana basicamente. Los pensamientos, por ejemplo, son cosas muy definidas que ocupan un lugar en el espacio, y cuando se agrupan pensamientos de la misma índole, que viajan a la velocidad de un rayo, se juntan en la atmósfera en un centro mental en el que quedan atraídos y crecen.
En cambio, la materia astral es mucho más densa y genera nubes voluminosas de formas emocionales, que reúnen intensos sentimientos en distintos centros que se confunden con otros sentimientos similares.
Los centros de pensamiento pueden generar sensaciones de ira o temor y las nubes emocionales sensaciones de furia y pánico al ser absorvidas por el chakra sin protección.
Pero también existen formas de sentimientos tales como el amor y la devoción que dispersas en la atmósfera se reúnen como sentimientos positivos que son absorbidos desde el chakra cardíaco.
La importancia de la influencia de estas energías es que el hombre las absorve de acuerdo al estado de similitud con las misma. Por ejemplo, si una persona sale a la calle con temor, se le pegarán a su cuerpo astral nebulosas de formas emocionales de temor que floten por su barrio y si no logra recobrarse de ellas, estas nebulosas descargarán a través del chakra su energía acumulada; por lo tanto, la persona degenerará su temor en pánico y perderá la cabeza, precipitándose al peligro. Afortunadamente hay sensaciones benevolentes que entran en el cardíaco y compensan estas situaciones.
Hay que tener en cuenta que existen cuatro emociones básicas con las que se construyen las demás: alegría, ira, dolor y temor.
Es la combinación entre ellas y su aplicación en determinadas situaciones lo que genera nuevas emociones. La ira, el dolor y el temor no son negetivas en si, y no se sienten negativas cuando se les permite su expresión natural. Son los depósitos de energía bloquedos los que se sienten negativos.
La ira, dolor y temor, son diferentes frecuencias del Prana que fluyen por el sistema de energía sutil.
Deberíamos de imitar a los niños, que expresan sus sentimientos honestamente en cualquier circunstancia y no dejarnos llevar por el proceso de aculturación que produce el bloqueo de masas de energía del tipo emocional en lugares inadecuados.
Si las personas expresaran sus emociones espontáneamente, en el momento adecuado, con ahorro de energía, no tendrían ningún problema; pues es la falta de movimiento de esta la que nos produce presión en el lugar equivocado y es eso lo que nos duele.
Los chakras actúan como válvulas de seguridad en el sistema de energía sutil, al abrirse impiden la acumulación nociva de energía dentro de nuestro cuerpo y permiten que las emociones fluyan a través del sistema libremente.
Cuando desde la infancia se enseña a interrumpir la función natural de los chakras, alterándolos según las normas sociales, se crean nuevas generaciones impedidas de la libre expresión de sus emociones en tres puntos: la entrada, la salida y el traslado del Prana.
El cuerpo físico con el tiempo se torna muerto en parte y la persona resulta insensible. A pesar de que este bloqueo temprano del chakra resulte dañino para la persona, es posible revertirlo y sanarlo, recuperando las funciones del chakra en su plenitud.
Por otra parte, no hay que dejar de tener en cuenta que los chakras que están en plena actividad cumplen otra función, se conectan con su correspondiente en el astral.
El chakra etéreo está en la superficie del doble etérico y el chakra astral se encuentra en el interior del cuerpo astral. Su función es transferir a la conciencia física toda cualidad inherente en lo correlativo al chakra astral.
El primero de estos chakras es el foco del kundalini, existente en todos los planos y cuya actividad despierta a los demás.
Debemos considerar al cuerpo astral como una masa casi inerte con una vaga conciencia y sin definida capacidad de actuación, entonces sucede el despertar del fuego serpentino del hombre astral. El segundo chakra astral corresponde al esplénico físico, que vitalizó el cuerpo astral y le permite hacer viajes conscientemente.
El tercer chakra astral corresponde al plexo solar físico y despierta la facultad de recibir sensaciones. La vivificación del cuarto chakra, que concide con el cardíaco del físico capacita al hombre para recibir y comprender vibraciones de entidades astrales conociendo sus sentimientos.
El despertar del quinto chakra astral que coincide con el laríngeo, otorga la facultad de escuchar en el plano astral, el mismo efecto audible que en el plano físico.
El sexto chakra astral, que corresponde al tercer ojo del físico, produce la visión astral o facultad de percibir la presencia de los objetos astrales.
El séptimo chakra que es el coronario del físico, completa la vida astral del hombre y perfecciona sus facultades. Así como se despiertan los chakras astrales se despiertan cualidades con los chakras etéreos.
Por ejemplo, cuando se despierta a la actividad el esplénico el hombre retiene un vago recuerdo de sus viajes astrales y suele producir la reminiscencia de la sensación de volar por el aire.
Cuando activa el plexo solar, percibe toda clase de influencias astrales comprendiendo las amistosas de las que no lo son.
La vibración del chakra cardíaco da al hombre el conocimiento de las alegrías y tristezas del prójimo y le mueve a reproducir en sí los dolores ajenos.
El chakra laríngeo lo capacita para oír voces que le sugieren ideas de toda clase y en plena actividad le confiere la clarividencia etérea y astral.
Por el chakra frontal el hombre puede ver lugares y personas astrales que están distantes. Está relacionado con la capacidad de la visión microscópica, ver aumentados los objetos físicos invisibles a simple vista corporal.
Cuando el chakra coronal está activado, el ego puede salir por el y dejar consciente su cuerpo y restituirse a el sin la ordinaria interrupción, de modo que está consciente día y noche.
Cuando el fuego serpentino ha pasado por todos los chakras, no se interrumpe la conciencia hasta la entrada en el mundo celeste al definir la vida astral, de modo que no hay diferencia entre la temporal separación del cuerpo físico durante el sueño y la definitiva en el momento de la muerte.
El kundalini, la ígnea energía, también llamada LA VOZ DEL SILENCIO es muy parecido a un fuego líquido que se difunde por todo el cuerpo cuando ha actualizado la voluntad y circula en espiral como una serpiente.
En plena actividad se la llama "la madre del mundo" porque vivifica los vehículos del hombre de manera que el ego sea consciente en todos los mundos.
Se debe advertir sin embargo que un inadecuado despertar del kundalini o intentar manejarlo sin concretas instrucciones de quien conozca del asunto puede traer graves consecuencias. Estas consecuencias se ven en lo físico y en lo mental, como para nombrar algunas, puede producir egocentrismo, orgullo desmedido, aumento de la soberbia, etc.
El objetivo de algunas corrientes de Yoga es el mismo que el de otras modalidades, la unión del alma con Dios, y para ello son necesarios tres clase de esfuerzos: de amor, de pensamiento y de acción. Que para otras corrientes espirituales podría denominarse también: amor, sabiduría y poder; o discernimiento, buena conducta y amor a Dios al Maestro y a los hombres. (A los Pies del Maestro, enseñanzas orientales)
En el arte japonés del Jin Shin Jitsu, el sushumna corresponde a un meridiano central llamado Gran Canal Central, formado por dos partes.
El meridiano conceptual que comienza en la lengua, baja por el cuerpo, pasa por los órganos sexuales y llega al coxis y se conecta con el meridiano regulador.
Este sigue el mismo camino ascendiendo por la columna hasta llegar a la cabeza y baja por la nariz, hasta el extremo de la boca.
El Gran Canal Central tiene la misma función del kundalini y es la principal fuente de energía Chi del cuerpo. El meridiano conceptual se llama "el gran caudal Madre" y el meridiano regulador se llama "el gran caudal Padre", uno es el más importante de los meridianos Yin y el segundo de los meridianos Yan. Juntos al Gran Canal Central forman el canal que rige la energía del cuerpo y del espíritu.
Aunque existen muchas escuelas diferentes de pensamiento acerca de los nadis en Yoga y de los meridianos en la medicina china, todas coinciden en el pasaje de energía vital.
La importancia para nosotros son sus funciones: la primera es su capacidad para absorber Prana directamente del aire por inhalación y la de arrojar toxinas al exhalar. Por eso algunos la comparan con la sangre.
La segunda función tiene que ver con la activación del kundalini o serpiente de energía que tenemos dormida en nuestro interior.
Cuando se logra que la cabeza de la serpiente mire hacia arriba y luego ascienda por la columna hasta llegar a la cabeza se alcanzó la iluminación.
Para lograr esto los Yoguis desarrollaron un grupo de ejercicios de respiración llamados Pranayama.
Otras corrientes creen lograrlo por medio de una serie de meditaciones que ponen a la persona en contacto  con su  Ser espiritual. Cualquiera sea la manera que uno elija para lograrlo siempre se debe contar con la guía de un experto o maestro.
  

                                  Fin  de

                 Energía Vital Kundalini
 

 

  

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